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Un millón de nuevos pobres
MADRID- La fragilidad del mercado laboral durante la crisis ha disparado el número de personas que han solicitado ayuda de Cruz Roja, una situación que afecta fundamentalmente a personas mayores y a inmigrantes. Según se desprende del informe anual sobre vulnerabilidad social 2011, hecho público ayer, la institución cerrará este ejercicio con 1.897.031 asistencias, un 120% más que en 2008.
El coordinador general de Cruz Roja, Antoni Bruel, mostró su preocupación por el incremento de los «nuevos pobres» (personas con ingresos familiares inferiores a 700 euros), situación que afecta a 1.138.218 de las asistencias, un 60 por ciento del total.
La principal causa de esta realidad es el impacto del desempleo. Así, el 91,3% de las personas encuestadas se encuentra en situación de pobreza relativa. Esto provoca que el 82% no pueda hacer frente a imprevistos, el 41,9% no puede conectar la calefacción en invierno y el 24,8 no ingiere proteínas en dos días, un dato diez veces superior que la tasa del resto de la población.
Bruel destacó que la crisis ha provocado un cambio de tendencia en los últimos años y se ha pasado de una vulnerabilidad de tipo social a la económica, y el estudio lo confirma. La media de ingresos familiares se sitúa en 528 euros mensuales, pero el 80% vive con menos de 800 euros, el 35% subsiste con menos de 500 y el 15% no tiene ningún tipo de ingreso.
El coordinador general de Cruz Roja alertó de la complicada situación de los inmigrantes, que con el pinchazo de la burbuja inmobiliaria no han podido reciclarse en otros empleos y muchos de ellos han perdido la residencia. En este sentido, el 13% de los atendidos declaró que desconoce el idioma y el 50% tiene problemas de vivienda. De este porcentaje, el 11,9% no tiene un hogar donde cobijarse y el 22,3 vive de «prestado» y cambia de domicilio de manera habitual. Además, un 22,5% del total no puede pagar los gastos asociados a la vivienda.
Niños y jóvenes
La vulnerabilidad familiar tiene una incidencia directa en los niños y jóvenes, lo que queda reflejado en su educación: el 96,8% tiene problemas en el colegio, el 40% sufre fracaso escolar y provoca el absentismo del 15%.
En cuanto a las personas dependientes, el 69% son mujeres –73% españolas–, el 94% carece de certificación de minusvalía, el 59% tiene a menores a su cargo y el 33% vive en una situación de vulnerabilidad grave o severa.
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