«Sois una alegría para toda España»

MADRID– En una coyuntura como la actual, la profesionalidad y el triunfo de un equipo consiguió levantar el pasado domingo lo que hasta ahora nadie había conseguido: el ánimo de un país. Así lo percibió el Rey y, ayer, en un discurso improvisado, se lo quiso transmitir a los jugadores. «Sois una alegría no sólo para nosotros, sino para España entera».

Los jugadores llegaron sobre las 18:00, una hora más tarde de lo previsto por el retraso del vuelo de la Selección. Sobre esa hora se comenzaron a entrever desde el jardín las figuras de Don Juan Carlos, la Infanta Elena, los Príncipes de Asturias, y una aparición no programada: Leonor y Sofía, las hijas de Don Felipe y Doña Letizia, también quisieron saludar al equipo.
Al igual que en el pasado Mundial las Infantas se vistieron con las camisetas de la Selección, en las que estaban escritos sus nombres. Doña Sofía no pudo estar por encontrarse de viaje en Filipinas.

Tras saludar a la Familia Real, las cerca de 60 personas que integran la delegación se fueron posicionando en la escalera que da al exterior para tomar la «foto de familia».

«No es fácil hablar a unos campeones», aseguró el Monarca. «Y menos a unos tricampeones». Para el Rey esta calificación no sólo se debe al resultado de los partidos, sino a la actitud de la Selección, que trató como referente. «Espero decir el sentir de los españoles, ya que habéis sabido conjugar ser buenos personalmente con ser buenos como equipo. Y ha sido fruto de vuestro saber hacer, trabajo y empeño». Y señaló el orgullo del país por unos deportistas «formidables». El Monarca también hizo una llamada de atención a la profesionalidad de Vicente del Bosque y las críticas que recibió al principio de la Eurocopa. «Ha tenido que aguantar cosas, pero aquí está el resultado. Enhorabuena».

Iker Casillas, como capitán, fue quien respondió a las palabras de Don Juan Carlos. «Majestad, muchas gracias por el recibimiento que nos ha dado en su casa». Y le entregó una camiseta firmada por todos, en la que estaba estampado el nombre del Rey y el número 1.

Después del acto, la Familia Real quiso quedarse unos minutos hablando con los jugadores. Algunos de ellos no se resistieron a acercarse a Leonor y a Sofía, que jugaban metiendo el brazo en la Copa. En Zarzuela se cuidaron todos los detalles, y así como la Infanta Elena y la Princesa escogieron el rojo en su atuendo, el Rey y Don Felipe optaron por lucir unas corbatas con el mismo color.

LA ANÉCDOTA
La indumentaria de los futbolistas en La Zarzuela rompía con cualquier norma de protocolo. El retraso les impidió cambiar el chándal por la chaqueta y la corbata y así se presentaron en la recepción. Piqué, además, a punto estuvo de darle dos besos a Doña Letizia.