Más de 100000 personas comen de ayudas

BARCELONA- «Decir que hay hambre en Cataluña no gusta, pero actualmente esto es verdad». Con estas contundentes palabras el presidente del Banco de Alimentos, Antoni Salvador, alertó ayer de la gran demanda a la que se afrenta día a día esta entidad cuyo almacén se vacía continuamente. Sólo en año y medio el Banco de Alimentos ha doblado el número de personas a las que ayuda, al pasar de 50.000 en 2009 a más de 102.00 a día de hoy. «En 22 años de existencia de Banco, nunca se había visto una cosa igual y las prespectivas son poco optimistas», denunció Salvador en la rueda de prensa con motivo de la entrega de 75.000 kilos de arroz, equivalente a 750.000 raciones, por parte de la Cámara Arrocera del Montsià. «Está muy bien ayudar a países en los que ocurre desastres como Haití, pero no hay que olvidarse de la enorme necesidad que hay aquí», dijo haciendo un llamamiento a cooperativas agrarias y entidades a hacer donaciones. «En tiempos de crisis la comida se ha convertido en lo único en lo que pueden ahorrar las familias con problemas económicos, ya que saben que hay entidades y centros en los que se puede comer, lo que no ocurre con las hipotecas o el alquiler, para los que no hay ninguna ayuda», matizó Salvador.Por si fuera poco, ante esta grave situación, las entregas de los alimentos del Programa Europeo de ayuda a personas necesitadas, que gestiona el Fondo Español de Garantía Agraria, lleva seis meses de retraso. Ante el incremento de la demanda, esta demora está complicando mucho el reparto de comida. El Programa Europeo aporta el 40 por ciento de los alimentos que reparte el Banco de Alimentos a través de sus casi 300 entidades. «La excesiva burocracia, algo de desidia y no poner medidas de urgencia en una situación de urgencia como es el hambre», son las causas que apuntó Salvador a este retraso.