Libros

Los Ángeles

Alto o mi madre dispara

Jackie Stallone es una peculiar astróloga especializada en la lectura de glúteos

A sus 90 años, la madre del actor usa tacones de vértigo: no tiene miedo a caerse de bruces. Está amortiguada
A sus 90 años, la madre del actor usa tacones de vértigo: no tiene miedo a caerse de bruces. Está amortiguadalarazon

Tras interpretar en 1992 a aquel policía enmadrado en la comedia «¡Alto!, o mi madre dispara», descubrir quién es la verdadera progenitora de Sylvester Stallone viene a confirmar el viejo dicho de que «la realidad siempre supera a la ficción». «Mi maravillosa, extraordinaria e impredecible madre tiene muchos talentos y, sin lugar a dudas, el mayor es su capacidad de vaticinar el futuro. Ella predijo con éxito todos los acontecimientos importantes de mi vida gracias a su extraordinaria maestría en la astrología. Es lo único que a ella le importa y, a decir verdad, lo único que sabe hacer». Éstas son las cariñosas –y sinceras– palabras que el protagonista de «Rocky» dedica a su madre. De hecho, la propia Jackie las recoge en su página web, donde se define como «la mundialmente conocida y apreciada astróloga y psíquica», aunque –por si acaso quedase algún sórdido rincón del planeta al que todavía no ha llegado su embrujo– apostilla: «También puede conocerme como la madre del icónico Sylvester Stallone y del premio Grammy, cantante y compositor Frank Stallone». O también –añadimos nosotros– la pueden conocer por haber resucitado la «rumpología», un arte ancestral que se basa en la lectura de los glúteos. Graduada en Químicas (superó sus estudios secundarios a los 40 años), Jackie fue la primera mujer que tuvo un programa de televisión diario sobre gimnasia (el culturista Charles Atlas entrenaba a su familia) y supo sacar partido a sus años como trapecista en el circo, convirtiéndose en una carismática y revoltosa celebridad en EE UU.
Con un infinito historial a sus espaldas, Jackie asegura que ha guiado espiritualmente a políticos y reyes y, con esa virtud por bandera, es una incondicional en cualquier sarao en el que sus hijos sean protagonistas. De hecho, el miércoles dejó a los presentes boquiabiertos –nunca mejor dicho– cuando se presentó en la «première» de «Los mercenarios 2», en Los Ángeles. Más que abusar del colágeno, lo que Jackie ha hecho es agotar las reservas de esta proteína para inyectárselas en sus labios. Y, claro, cuesta apreciar su rostro detrás de tal masa espongiforme. Pero, aunque da pereza pararse a pensar cuánto carmín habrá agotado para barnizar la superficie, hay que reconocer el mérito que tiene esta señora –que cumplirá 91 años el próximo noviembre– para convertir a toda la «troupe» de tipos duros del filme (Van Damme, Chuck Norris, Schwarzenegger y su propio hijo) en un insulso escaparate de peleles a los que podría dejar fuera de combate con el simple chasquido de sus labios.


Su Álter ego patrio
Entre Esperanza Gracia y Carmen de Mairena

Físicamente, hay un incuestionable abuso de las intervenciones estéticas que la convierte en el alma gemela de la entrañable Carmen de Mairena. Sin embargo, sus dotes astrológicas –y la ruleta del horóscopo que utiliza en su página web– recuerdan en mucho a Esperanza Gracia, que tantas madrugadas de insomnio ameniza.