Navarra

ETA ordena a su entorno que diga a los presos que «no les olvidan»

ETA ha dado instrucciones a los grupos de su entramado, entre ellos Batasuna, que está integrada en Bildu, para que promuevan todo tipo de iniciativas con el fin de transmitir a los presos que nadie se olvida de ellos y que, en los planes inmediatos de la banda, ocupan un lugar preferente.

La manifestación del viernes en Bilbao puso el colofón a una semana de actos a favor de los presos de la banda terrorista
La manifestación del viernes en Bilbao puso el colofón a una semana de actos a favor de los presos de la banda terroristalarazon

De ahí los actos, algunos prohibidos por la autoridad judicial o de Interior, que han sido convocados por estas organizaciones (o personas privadas, con el fin de facilitar su celebración) en las fiestas del País Vasco y Navarra. Como ocurrió esta semana en Bilbao, los convocantes anuncian que acatarán la prohibición y después realizan una proclama a favor de los reclusos con la «simple» cita de sus nombres de pila. Todos los que están allí saben de qué se trata y se ha conseguido regatear las órdenes de la Audiencia Nacional.

ETA controla la inmensa mayoría de sus presos (salvo una veintena que se encuentra en la cárcel de Nanclares de la Oca), más de seiscientos en centros de España y Francia. Según han informado a LA RAZÓN fuentes antiterroristas, al comienzo del actual «proceso» se les transmitió que esta vez no se les dejaría para «el final», como ocurrió en el pasado. Los «estrategas de la banda mantenían que los reclusos podían ser utilizados por el Gobierno de turno para forzar una negociación «a la baja», pero tuvieron que cambiar de guión. En un documento que los presos han debatido se indicaba que «previendo que el proceso puede ser largo, no se puede retrasar hasta ese momento la amnistía y la excarcelación de los presos. De hecho, teniendo el enemigo en sus manos a secuestrados políticos, el alargamiento del proceso, en vez de ponerse a nuestro favor, se fortalece como elemento condicionante». «Por otro lado, –añadía– la excarcelación de los presos puede ser un activo político para la Izquierda Abertzale si se dan pasos para capitalizarlo y si se integra como triunfo». Se trataba de un cambio estratégico que debía ir acompañado, como ocurre este verano, de actos de apoyo a los reclusos para transmitirles que nadie se olvida de ellos. Que se crean protagonistas y, como se ha dicho, que serán ellos sobre los que decidan sobre el abandono, o no, de las armas.

El «proceso», según las citadas fuentes, no va tan bien como esperaban sus promotores, sobre todo por las actuaciones de Bildu; el obligado y extraño adelantamiento de las elecciones; y la cerrazón de ETA en no dar más «pasos» hasta que se le hagan nuevas concesiones o el Gobierno que salga de las urnas acepte una nueva negociación.