«Mireia está serena»

londres- Mireia Belmonte es la gran esperanza de la natación española y eso le ha pasado factura en muchas ocasiones. Su participación en Londres no ha empezado bien. Llegó a la final de 400 estilos, pero no la nadó bien. «En la espalda creo que los nervios me empezaron a contraer los músculos», explicó. En los 400 libres, ayer, no pasó las series. Lo peor es que en ambas ocasiones estuvo lejos de sus mejores registros, el objetivo que busca, ya que las medallas están bastante caras. «No estaba en las previsiones entrar en la final de 400 libre, pero con su marca hubiera estado ahí», explica Luis Villanueva, director técnico de la Federación Española. «Todos esperábamos mucho y ella es la primera sorprendida porque pensaba que estaba mejor, pero ha reaccionado bien», añade. Villanueva no pone ninguna excusa. Ni el exigente calendario de la catalana: «Lleva años preparándose para nadar tantas veces y para recuperarse rápido», asegura Villanueva. Ni la presión que tiene que soportar: «Ha madurado mucho y, aunque en el pasado hubo momentos en los que no sabía muy bien lo que quería, ahora lo tiene claro. Mentalmente también está preparada». Ni el hecho de que en unos Juegos todo está menos controlado por vivir en la Villa Olímpica o tener que estar pendiente del transporte. «Está serena y va a seguir luchando», continúa. Su plan sigue adelante porque para ello se ha machacado en los entrenamientos. «El cansancio no es excusa», repite la propia nadadora. No renunciará a ninguna prueba. En la tarde de ayer descansó y hoy volverá a la competición en los 200 mariposa. «La mariposa se le dio bien en la prueba de los estilos. Veremos. Se puede meter en semifinales y si llega a la final sería un gran resultado», añadió el director técnico de la RFEN. Mireia irá pensando en el día a día, aunque quizá en los 800 metros es donde más opciones tenga.
Los Juegos no ruedan bien para la natación española. Aschwin Wildeboer, finalista en Pekín, se quedó ayer fuera de la final de 100 espalda.