Los conductores de bus desconvocan los paros para negociar

barcelona- Los autobuses públicos de Barcelona circularán con normalidad hasta nuevo aviso. Así lo decidieron ayer, reunidos en asamblea los trabajadores de Transports Metropolitans de Barcelona en las cocheras de Sants, mientras en la calle la jornada de paros convocados en bus y metro discurría con cierta tranquilidad.
Según informó la Coordinadora Obrera Sindical (COS), los conductores de autobuses urbanos decidieron «desconvocar los paros parciales que realizaban desde septiembre y dar tres semanas a la dirección para que negocie un acuerdo aceptable para la plantilla en relación al Real Decreto». Falta saber si los empleados de metro, que acumulan ya tres jornadas de huelga, se sumarán a la decisión de sus compañeros o no.
«Pido a todo el mundo que tenga voluntad de diálogo», declaró ayer el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, porque «siempre se puede llegar a acuerdos pero dentro de los límites y la ley». En este caso, tal y como defiende la dirección de TMB, la ley es el Real Decreto del Gobierno por el que procede suprimir la paga extra de Navidad a sus trabajadores, por lo que, según la empresa, está obligada a aplicarlo a pesar de que los trabajadores protesten o se manifiesten.
En todo caso, de no llegar a un acuerdo las partes, los conductores de bus amenazan con retomar los paros parciales en plena campaña electoral, concretamente del 12 al 16 de noviembre y del 19 al 23 del mismo mes.
De momento, durante las huelgas que han protagonizado los empleados del metro y bus no ha habido graves incidentes y los ciudadanos han hecho los esfuerzos correspondientes para capear la falta de transporte público. Es el caso de María Jesús, que toma la línea 9 de bus (ayer de las pocas con servicios mínimos) para ir a trabajar a la Zona Franca. Asegura que entiende la huelga, pero ésta la obliga a salir una hora antes de casa de lo habitual. Por su parte, Juan que trabaja como comercial y depende del transporte público no ve con tan buenos ojos los paros y señala que «nunca he entendido las huelgas».