Fomento destinará 1194 millones al pago de deudas

Madrid- Un «presupuesto de sacrificio». Ése es el que presentó ayer la ministra de Fomento, Ana Pastor, que, además, explicó que la línea básica de inversión será «priorizar las obras más relevantes». Y es que no le queda otra a los gestores del departamento. Con un recorte en la partida para inversiones del 14,8%, que queda para el año próximo en 10.161 millones de euros, no hay dinero para todo y hay que seleccionar. Y eso es lo que hará Fomento, que pondrá énfasis en acompañar los proyectos a los requerimientos presupuestarios y en seleccionar aquellos que, además de contar con los requerimientos técnicos, sean «realistas», explicó Pastor.

El tajo que sufrirá el ministerio inversor por excelencia se dejará sentir en todas las parcelas. Los ferrocarriles seguirán siendo los que dispongan de más recursos, 4.705 millones de euros, el 47% del total. De ellos, el 71%, 3.302 millones, serán para la alta velocidad, que ve así mermados sus fondos en un 21%. Los corredores noroeste –el AVE a Galicia– y norte –País Vasco, así como la línea Venta de Baños-Asturias– se llevarán 1.755 millones. El estratégico Corredor del Mediterráneo contará con 1.019 millones de euros, 270 de ellos para adaptar el ancho de vía a los estándares europeos.

El presupuesto para carreteras será de 2.963 millones, un 6,3% inferior al de este año. Sus actuaciones se verán limitadas no sólo por esta bajada sino por otros impedimentos. Para empezar, Fomento tendrá que pagar 99 millones en compensaciones a concesionarias que rebajaron los precios de los peajes hace unos años y destinar otros 200 millones de euros a préstamos para las autopistas de peaje en riesgo de quiebra. De momento, cuatro ya se han acogido al concurso de acreedores, pero el secretario de Estado de Infraestructuras, Rafael Catalá, aseguró que se atenderán todos los pagos del ejercicio. Pese a lo acuciante de la situación y lo limitado de los recursos, el número dos de Fomento descartó la implantación de peajes en todas las autovías del Estado.

Junto a estos dos desembolsos, el Ministerio deberá afrontar pagos de deudas «heredadas» asociadas a las vías, como las calificó Pastor, por valor de 664 millones de euros –en total, el Ministerio pagará 1.194 millones de euros por este concepto–, el 22% del presupuesto de carreteras.

Descontados estos pagos, a Fomento le quedarán 1.084 millones para construcción y otros 818 millones para conservación, uno de los aspectos en los que quiere hacer mayor hincapié ante la escasez de recursos para nueva construcción.

Aeropuertos y seguridad aérea contarán con 847 millones, que Fomento quiere destinar de forma prioritaria a «optimizar las instalaciones» con las que cuenta en estos momentos, un perfil muy distinto al de los años previos a la crisis, fecundos en nuevas terminales. Las cuentas sólo incluyen cuatro actuaciones en instalaciones aeroportuarias: la pista de vuelo de La Coruña, el edificio de la terminal de Gran Canaria, la segunda fase de la terminal de Vigo y la ampliación y remodelación de las áreas comerciales de los aeropuertos de Barajas, El Prat y Málaga.

Los puertos contarán con una partida muy parecida a la de los aeropuertos, 839 millones. El presupuesto de inversiones asciende a 733 millones de euros.