La inflación se dispara y hace un roto en el bolsillo familiar

De confirmarse el dato el próximo 15 de febrero y según el instituto, la subida, histórica, se debe al repunte del precio de los alimentos y las bebidas no alcohólicas, así como al alza del coste de la luz, que en enero encareció las facturas el 9,8%. Razón por la que el PP acusa al jefe del Ejecutivo de «ahogar en la crisis a todos los españoles» y tilda la última subida de «desproporcionada». La UCE (Unión de Consumidores de España) advierte de una «situación insostenible». Tampoco sopla a favor el precio de los carburantes, ya que el barril del petróleo Brent se situó el pasado mes en los 96,82 dólares, frente a los 77 dólares del mismo mes del ejercicio anterior. Aun así, la inflación de la Eurozona se quedó en enero en una cifra muy inferior a la española: selló el 2,4% y sólo subió dos décimas, según desveló ayer Eurostat. Además, en nuestro país, no hay visos de mejora en el corto plazo. Según FUNCAS y el IEE (Instituto de Estudios Económicos), la previsión de febrero es que los precios continúen por la senda alcista y haya que esperar al segundo semestre para que el IPC inicie su descenso y ronde el 1,6% en el cierre de 2011.

En este escenario se dibuja la pérdida de poder adquisitivo, ya que al repunte del IPC y a la escalada del precio de la luz se añaden las restantes subidas de enero: la del gas (en un 3,9%), la del precio de la bombona de butano, que pasó a valer 13,19 euros (lo que equivale a un incremento del 3,13%) y la de los transportes: el precio del billete de autobús interurbano se encareció el 1,7% y las tarifas de Renfe apretaron con subidas de un 3,1% para Cercanías, de un 2,3% para el AVE de larga distancia y de un 4,8% para el AVE de media distancia. Así, mientras se disparan las facturas, merman las subidas salariales. El mes de noviembre del pasado año, según el Ministerio de Trabajo, se archivó la cifra que da prueba de ello: si los salarios llegaron a crecer un 4,21% en 2008 y continuaron el descenso en 2009 con un 2,27%, al cierre de 2010 la cifra se redujo hasta el 1,29%. Es decir, la evolución de los salarios en 2010 nada tiene que ver con el comportamiento de las revisiones salariales de los años previos a la crisis. En cualquier caso, en 2009 sólo el 50% de los convenios recogía una revisión salarial. Un porcentaje que se queda en el 23% en el pasado año.

Asimismo, casi siete millones de trabajadores pactaron hasta noviembre de 2010 una subida salarial media de un 1,29%, lo que se traduce en 2.581 convenios firmados, pero sólo los que contaron con una cláusula de revisión salarial (el 45,6% de los trabajadores) pudieron esquivar la pérdida de poder adquisitivo. Se trata, por tanto, del menor aumento de los últimos tres años y esclarece que el ejercicio comienza con un aumento de los precios muy superior a la evolución de los salarios.