Debate Estado Nación
Zapatero-Belén Esteban: el careo más esperado
El 23,2 por ciento de los españoles quiere ver un enfrentamiento entre el presidente y la ex de Jesulín.
La ministra de Vivienda es poco dicharachera y no parece de fiar. Miguel Ángel Moratinos brilla por su elegancia.Y Trinidad Jiménez, con chupa de cuero o no, derrocha sensualidad y credibilidad. Al menos así se desprende de la encuesta de NC Report para LA RAZÓN. El otro barómetro. Si los cuestionarios habituales del CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) recogen una valoración general de la percepción de la gestión de los políticos y de la intención del voto, nuestro diario ha querido pulsar la opinión de los ciudadanos sobre otras actitudes del Gobierno de Rodríguez Zapatero, justo cuando sufre su particular viacrucis con el plan de ajuste económico. ¿Quién es la más valorada en la encuesta de la popularidad? La titular de Sanidad, Trinidad Jiménez. Los españoles la ven como la ministra más sexy, aunque apenas logre un 4,4 sobre 10.También es la más creíble de cuantos pasan por Moncloa, aunque, como el resto del Gobierno, esté suspensa en esta tarea. Además es considerada la menos sosa. En cambio, los ciudadanos castigan a la ministra de Vivienda, Beatriz Corredor, y a Ángeles González-Sinde, ministra de Cultura, coronada como la menos creíble y elegante. Precisamente un hombre está en el «top» de la elegancia: el ministro de Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, un valor que también se le reconoce a Elena Salgado y, de nuevo, a Jiménez. Aperitivo con De la VegaPero la encuesta no se queda ahí. Da un paso más y se les propone a los españoles que compartan algo de su tiempo con los ministros. Así, los españoles elegirían para irse de cañas un domingo a Fernández De la Vega. Y si la vicepresidenta estuviera ocupada, el 4,8 por ciento compartirían vermut y aceitunas con Jiménez y el 4,3, con Rubalcaba. Si de lo que se trata es de elegir vecinos, el 11,8 por ciento huiría de José Blanco. Sin embargo, no les importaría encontrarse en el descansillo con Elena Espinosa, Manuel Chaves y Miguel Sebastián. En esta línea de filias y fobias, y después de que el ministro de Fomento acudiera la semana pasada al magazine «La Noria», ¿a qué miembro del Gobierno mandaría a «Sálvame Deluxe» para un careo con Belén Esteban, la «princesa del pueblo»? Dicho y hecho. Al 23,3 por ciento de los españoles le gustaría contemplar un cara a cara de José Luis Rodríguez Zapatero con la ex pareja del diestro Jesulín de Ubrique, muy por encima de aquellos que desean un enfrentamiento entre la ganadora de «Más que Baile» y Teresa Fernández de la Vega (12,5 por ciento), o, en su defecto, José Blanco (6,1 por ciento). Por contra, parece que no tendría el mismo atractivo para la audiencia si el que se batiera en duelo con la Esteban fuera el ministro de Justicia, Francisco Caamaño (0,1 por ciento).Espinosa, poco aventureraSi el salto se diera a los «reality shows», el presidente tendría, a priori, las de perder, en caso de adentrarse en la casa de «Gran Hermano». El 23,4 por ciento de los encuestados le nominaría, junto con Blanco (6,6 por ciento) y Bibiana Aído (6,5 por ciento). A la cola de este ránking, y por tanto, aquellos que serían más aptos para la convivencia con las cámaras en Guadalix, serían Elena Espinosa (0,1), Beatriz Corredor (0,3) y Cristina Garmendia (0,4).Si la aventura fuera en medio de la selva, los españoles también tienen claro que sería Zapatero el que mejor se enfrentaría a la adversidad en «Supervivientes». El 15,3 por ciento lo cree así. También se les ve preparados para la aventura a Fernández de la Vega (13,2), con gran diferencia respecto a Blanco (7,8) y Rubalcaba (4,1). En cambio, los españoles creen que la que peor se desenvolvería entre cocos y barracudas es precisamente la titular de Medio Ambiente, Rural y Marino, Elena Espinosa (0,1).
Los políticos, con la genteLa participación del ministro de Fomento en «La Noria» (en la imagen) el pasado sábado fue cuestionado, pues hasta la fecha ningún otro ministro había participado en un magazine que lidia con temas políticos y asuntos del corazón. «Los políticos deben ir donde está la gente», justificó Blanco. El programa registró un 17% de «share», es decir, 1,9 millones de espectadores, por encima de resultados de «celebrities» como Belén Ordóñez.
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