Gasol humillado y de vacaciones

Nunca un equipo dirigido por Jackson había sido barrido de los «playoffs» por cuatro a cero, y tampoco estaba muy acostumbrado a caer por 36 puntos como le sucedió ayer. Uno de los técnicos más ganadores de la historia de la Liga puso el punto y final con una estruendosa caída, totalmente impensable cuando hace menos de un mes comenzaba la lucha por el título. Nunca se sabrá cuánto ha influido el prematuro anuncio de jubilación por parte del jefe, pero lo cierto es que el equipo se ha mostrado impotente, falto de espíritu y hasta dividido a lo largo de la serie.

A veces no es tan grave perder como la forma de hacerlo y los Lakers se despidieron enseñando las peores sensaciones. Lamar Odom fue expulsado por empujar de mala manera a Nowitzki cuando el partido ya era una fiesta para los Mavericks, y Bynum le acompañó poco después tras incrustar su codo en las costillas del pequeño J.J. Barea. Los demás «lakers» ni siquiera tenían ganas de quejarse, sólo bajaron la cabeza para esperar que pasase el chaparrón. Ni Kobe fue capaz de cambiar nada.

Gasol no pudo escapar al desastre de los suyos, aunque esta vez no se llevó una reprimenda pública de su entrenador. Fue uno más en la crisis, culminando su peor postemporada vestido de púrpura y oro. Pau ha firmado cinco puntos y tres rebotes por partido menos en estos «playoffs» que durante la primera fase de la temporada, aunque lo que más le critican es su supuesta falta de intensidad. Las acusaciones de ser un jugador flojo han reaparecido ahora que las cosas no funcionan, aunque lo cierto es que ni Kobe se escapa del derrumbe. Magic pidió cambios drásticos y Brian Shaw encabeza la lista de nombres para el banquillo. Lo único positivo es que Pau tendrá mucho descanso antes del Europeo de Lituania.