Irán

La ley del Talión

La Razón
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Hay noticias estremecedoras. Después de milenios de sufrimientos e injusticias, la Humanidad ha evolucionado en algunas zonas hasta establecer una serie de convenciones que nos hacen mejores que nuestros antepasados o por lo menos eso creemos. La democracia, la libertad y los derechos humanos son esos elementos fundamentales que deberían ser comunes en todo el mundo. Es triste pero no es así. Un ciudadano iraní ha sido condenado a perder un ojo y una oreja en aplicación de la antigua ley del Talión que sigue vigente en Irán. Como había causado esas lesiones a otro hombre se le aplica el mismo castigo. Es otra muestra de que la Alianza de Civilizaciones, que propugnaba Zapatero, nunca ha tenido sentido. Es cierto que es una iniciativa que ha quedado sepultada en el baúl de los recuerdos, pero no hay que olvidar que el régimen teocrático iraní no respeta los derechos humanos y quiere la destrucción de Israel. La Ley del Talión es una barbaridad, pero también un inquietante ejemplo de la realidad iraní.