Austria

La Casa Cuna recibe un 55 por ciento más de embarazadas en riesgo de exclusión

Llegan desesperadas y «muy deterioradas», sobre todo las españolas, confirman las monjas que las atienden.

La Casa de la Caridad de Valencia fue una de las cuatro asociaciones elegidas por el Villarreal F. C. para recibir parte de la recaudación del partido de vuelta de la Copa del Rey contra el Valencia. El presidente del club, Fernando Roig, repartió con es
La Casa de la Caridad de Valencia fue una de las cuatro asociaciones elegidas por el Villarreal F. C. para recibir parte de la recaudación del partido de vuelta de la Copa del Rey contra el Valencia. El presidente del club, Fernando Roig, repartió con eslarazon

VALENCIA- La Casa Cuna de Santa Isabel cuenta con 22 plazas para atender a mujeres embarazadas. Las acoge, les da asistencia médica, formación y el hogar que la mayoría de ellas nunca ha tenido. 22 camas y 22 cunas que a veces no son suficientes para una demanda que la crisis ha disparado hasta cifras nunca antes vistas. Si en 2009 atendió a 156 gestantes -entre aquellas que residían en su sede y las externas que acudían de manera frecuente-, el año pasado el número se elevó a 242.

«Nos llegan más chicas, y además más deterioradas, sobre todo las españolas». Sor Aurora Gallego dirige el centro y constata la mayor afluencia de embarazadas en peligro de exclusión social, pero no se muestra preocupada por un futuro peor. «Ninguna de las mujeres que acude a nosotros, se queda en la calle. Si nos llega la embarazada número 23 y no hay una cama libre, una de las hermanas le cede la suya». A ellas, dice, les sobra todo. «Con el hábito que llevamos, tenemos más que suficiente». Así que las donaciones y subvenciones se destinan prácticamente de manera íntegra a la asistencia de las necesitadas.

Van tirando y, aunque asegura que la crisis no ha menguado la solidaridad ni las donaciones - «no nos podemos quejar»- advierte que «nunca está de más recordar que existen programas como éste».

Sor Aurora lamenta sin embargo que se den casos como el de Alemania, donde el pasado día 4 un hombre abandonó a un bebé dentro de una maleta. La entidad que dirige, trató hace tiempo de poner en marcha un sistema similar a los antiguos tornos de los conventos donde se abandonaban de manera anónima a los recién nacidos. No obstante, se les denegó el permiso, ya que en España la madre que entrega un hijo en adopción, debe identificarse -aunque mantiene su anonimato- a fin de se obtenga toda la información necesaria del niño, por ejemplo si padece alguna enfermedad o precisa tratamiento médico.

No ocurre así en varios países europeos, entre los que se encuentra la República Checa, Austria, Suiza, Alemania, Hungría e Italia, donde los «baby box» son legales. Se trata de cajas-incubadora instaladas en hospitales, centros sociales o puntos de interés, en las que los padres pueden abandonar a sus hijos no deseados de forma segura y preservando el anonimato. Pero los hospitales españoles se ven forzados a recurrir a la figura del asistente social, que es el que tramitar en primera instancia el proceso de adopción.


El fútbol más solidario
La Casa de la Caridad de Valencia fue una de las cuatro asociaciones elegidas por el Villarreal F. C. para recibir parte de la recaudación del partido de vuelta de la Copa del Rey contra el Valencia. El presidente del club, Fernando Roig, repartió con esta entidad y Cáritas de Puçol y Vila-real, y Obra Social e Integración al Marginado de Castellón de La Plana, los 34.525 euros de la colecta.