Moscú
Moscú ofrece ayuda diplomática a los presuntos espías rusos detenidos en EEUU
El Gobierno ruso ofreció hoy asistencia diplomática a los diez presuntos espías detenidos en Estados Unidos bajo la acusación de trabajar para Rusia y pidió a Washington más información sobre este incidente.
"Si (los detenidos) necesitan este tipo de asistencia, se la ofreceremos plenamente", declaró en rueda de prensa el portavoz de la Cancillería rusa, Andréi Nesterenko, al ser preguntado sobre si Moscú se proponía ayudar a los acusados de espionaje.
Tras revelar Washington la captura de los presuntos espías, Moscú declaró que la mayoría de ellos son "ciudadanos rusos que en otro tiempo fueron a parar a territorio norteamericano", y negó que éstos cometieran actos dirigidos contra los intereses de EEUU.
"Proteger a los ciudadanos rusos en el extranjero es una obligación sagrada de nuestras misiones diplomáticas y de sus departamentos consulares en otros países", subrayó Nesterenko.
El diplomático insistió en que Moscú todavía no ha recibido de Washington suficiente información sobre este caso.
Mientras, el representante del Kremlin para la defensa de los derechos de los menores, Pável Astájov, expresó su preocupación por el futuro de los hijos de las parejas detenidas.
"No se puede permitir que se violen los derechos de los niños y que éstos sean alojados en orfanatos en caso de que tengan familiares dispuestos a acogerlos temporalmente", señaló el Defensor del Niño en un comunicado.
Según las autoridades estadounidenses, ocho personas fueron detenidas el pasado domingo bajo la acusación de realizar durante un "largo periodo de tiempo"misiones encubiertas en Estados Unidos actuando como agentes para Rusia.
Además, otras dos personas más fueron arrestadas por participar supuestamente en un programa para la inteligencia rusa.
Un total de once personas, incluidos los diez detenidos el domingo, están acusados en dos causas criminales presentadas por separado con cargos de "conspiración"por actuar de manera "ilegal"como agentes rusos en territorio estadounidense.
Nueve de los detenidos afrontan, además, cargos por "lavado de dinero". Tanto Moscú como Washington han expresado la esperanza de que su nueva etapa de relaciones no se vea afectada por este incidente, que ocurre pocos días después de una visita del presidente ruso, Dmitri Medvédev, a Estados Unidos.
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