Mariano Rajoy: «Y por qué no lo han hecho antes»

EMPLEO
No cambiará la protección

Rajoy recordó que España llegó a tener los mismos niveles de desempleo que Alemania y Francia en la etapa de Aznar, cifras que se han disparado hasta 14 puntos durante el mandato socialista por la «mala» gestión de la economía. El resultado, enfatizó insistentemente, son los más de 5 millones de personas sin trabajo porque el Ejecutivo socialista no ha sido capaz de «corregir la situación y ha generado desconfianza dentro y fuera de España». También le echó en cara la reforma laboral de 1992, «el mayor recorte al desempleo que provocó una huelga general», y la reforma laboral aprobada en esta Legislatura, que «ha generado más desempleo» y permite que se encadenen contratos laborales durante toda la vida. Negó tajantemente que vaya a modificar el seguro de desempleo. «No me atribuya intenciones. Ustedes sí que han reducido las prestaciones por desempleo».

IMPUESTOS
No subirá la carga fiscal

El candidato popular se desmarcó ayer del impuesto para la banca y para las grandes fortunas planteado por Rubalcaba. Sobre el primero, cuestionó que sirva para aumentar el crédito, para disminuir las comisiones y para crear empleo. Del impuesto a los ricos, afeó al PSOE que solo se acuerde de ellos en la campaña electoral porque durante su Gobierno suprimieron el Impuesto del Patrimonio, subieron el IVA, subieron el impuesto de la renta a las clases medias y también subieron los impuestos especiales «que pagamos todos». Una de sus armas fue enfrentar a su oponente con los recortes aprobados en esta Legislatura: pensiones, funcionarios, cheque-bebé, deducción de 400 euros... «Y todo eso no lo llevaban en su programa electoral. Yo no soy como ustedes, así que no me atribuya un programa oculto porque no lo tengo».

POLÍTICAS SOCIALES
Garantizarlas creando empleo
 
Rajoy ratificó su compromiso con la Educación y la Sanidad pública y confirmó que garantizará el poder adquisitivo de los pensionistas. «No voy a congelar las pensiones de los pensionistas y voy a cumplir la ley que aprobamos en el 98. No engañaré como hicieron ustedes a los pensionistas en esta Legislatura», proclamó, después de recordar que en la etapa de Aznar hubo 5 millones de afiliaciones a la Seguridad Social y por cada seis nuevos cotizantes había un pensionista, mientras que tras la etapa de Zapatero hay un cotizante por cada pensionista. También miró al 96 para recordar que entonces tuvieron que pedir un crédito para pagar las pensiones porque estaban en quiebra. Ya en un pasado más cercano, Rajoy echó en cara a Rubalcaba los recortes en Sanidad, Educación y en otras políticas sociales que incluyen los Presupuestos de este año. En esta materia, advirtió de que la capacidad de recaudación del Estado es la única manera de evitar que se vuelvan a recortar las prestaciones y a congelar las pensiones. «Como no sepamos gestionar la economía, como no creemos empleo, podemos tener las mejores de las intenciones, pero vamos a tener un problema muy grave».

TERRORISMO
Unidad para acabar con ETA

En este apartado, Rajoy se limitó a comprometerse a colaborar y a hacer un esfuerzo para mantener la unidad y para terminar definitivamente con la banda terrorista. Si en materia económica o social acentuó sus diferencias con el PSOE, en este terreno las obvió y no bajó al detalle de la política penitenciaria –sobre la que Rubalcaba es partidario de introducir cambios después del 20-N– ni tampoco valoró el futuro político de Amaiur.

CONCORDIA Y UNIDAD
Oferta de pacto nacional al PSOE

Para el final se dejó su mensaje de concordia y de llamamiento a trabajar todos juntos para superar la crisis, con oferta de pacto de Estado al PSOE, y a los demás partidos, si gobierna. «Sé que no es fácil, sé que será difícil..., pero se puede hacer, tenemos una gran oportunidad por delante, hemos superado muchas cosas y España es una gran Nación que no se rinde nunca». Rajoy presentó el 20-N como la elección entre seguir igual o ver la luz al final del túnel. «Estamos a su diposición. Ustedes deciden».