Nuevo ajuste por César Lumbreras

La primera propuesta con cifras para negociar el gasto comunitario del periodo 2014-2020 adelantada por la presidencia chipriota recoge una reducción sobre las cifras planteadas por la Comisión Europea, hace ya más de un año, de 50.000 millones de euros. Con ser esto importante, no lo es todo, porque, encima, van los de Nicosia y dicen que no será suficiente y que, para llegar a un acuerdo, habrá que meter la tijera todavía más. Y es que hay un grupo de estados miembros, que se llaman a sí mismos «amigos de un mejor gasto», en el que están integrados Reino Unido, Holanda, Suecia, Dinamarca y, lo que es más grave, Alemania, que quieren que se recorten entre 100.000 y 120.000 millones de euros sobre un presupuesto total planteado por la Comisión de 1,033 billones de euros. En las próximas semanas se negociarán estas cifras en el seno del Comité de Representantes Permanentes de la UE y el día 20 llegará el turno del Consejo de Asuntos Generales. El objetivo es alcanzar un acuerdo en la Cumbre Europea del 22 y el 23.

La PAC se vería muy afectada por los recortes y España, como segundo beneficiario de los fondos de esta política, también sufriría mucho las consecuencias. Según el Ministerio de Agricultura, si se suman todos los tajos que hay planteados encima de la mesa, los fondos de la PAC que llegarán a nuestro país en el próximo Marco Financiero bajarían hasta un 18 por ciento en relación con las cantidades del actual. Si tomamos como referencia la cifra de 7.000 millones de euros al año, nos encontraríamos con una reducción aproximada de 1.260 millones de euros, una cantidad muy importante. Eso es lo que está en juego en estos momentos para el sector agrario español. Ya veremos si el Gobierno da la talla en la negociación.