Las ONG refuerzan su seguridad por las amenazas de secuestro

Intermón-Oxfam e Intervida han reforzado las medidas de seguridad para proteger a sus cooperantes por el riesgo de secuestro a manos de grupos armados islamistas, tras recibir alertas de las embajadas francesa y estadounidense en Malí y Burkina Faso, así como del Ministerio de Asuntos Exteriores español.
 
En declaraciones a Europa Press, la coordinadora de Ayuda Humanitaria de Intermón-Oxfam, Elena Sgordati, ha revelado que tanto la Embajada francesa como la norteamericana en Burkina Fasso han alertado a las ONG sobre la reactivación de grupos terroristas en la frontera con Malí, donde la entidad tiene un proyecto de seguridad alimentaria.

"Hemos revisado nuestros protocolos de seguridad", ha apuntado Sgordati, y ha explicado que han trasladado a los expatriados occidentales a zonas de menos riesgo, mientras que en la frontera con Malí han situado a cooperantes originarios de otros países africanos
y a personal local, por no tratarse de un blanco preferente.

Sobre el secuestro de los cooperantes de la Caravana Solidaria, ha indicado que no afectó sus proyectos, pero que les obligó a ser más rigurosos. "Hemos hecho un análisis continuo de la información sobre el terreno y de la conveniencia de utilizar transportes públicos; hemos revisado la seguridad de las rutas y determinado los lugares de riesgo; tenemos un registro de los incidentes en el país, y conocemos en todo momento la localización del personal local", ha detallado. 

"Las entidades deben tomarse la seguridad en serio, porque no todos los actores perciben de forma positiva la ayuda que llevamos", ha remarcado, y apuntado que el suceso entraña una "lección muy importante"para los convoyes solidarios. "La seguridad es un elemento estratégico vital, no podemos ser ingenuos", ha reiterado.

Los protocolos de seguridad de Intermón-Oxfam se basan en la "aceptación"por parte de los ciudadanos y las autoridades locales, y son específicos para cada proyecto, país y zona dentro de un mismo estado.

 En cuanto al aumento de agresiones a ONG, ha constatado que "el espacio humanitario se ha reducido y la percepción de los cooperantes como figuras neutrales se ha degradado", por la presencia de nuevos grupos armados poco estructurados que desconocen, en gran medida, la naturaleza del trabajo humanitario y por la "islamización de los conflictos".


Alerta en Mali

Intervida ha retirado temporalmente a su personal expatriado de Malí por el riesgo de secuestro en el norte del país, después de que la embajada francesa urgiese a las ONG a trasladar a los europeos a la capital, Bamako.

Una cooperante catalana de Intervida en Africa, que ha declinado publicar su nombre por motivos de seguridad, ha explicado a Europa Press que la Embajada española ha instado a los cooperantes a redoblar las medidas de precaución, evitando lugares remotos y salidas en solitario.
 
"La diplomacia francesa tiene otras informaciones y ha pedido a sus ciudadanos que se trasladen a Bamako", ha añadido la cooperante, que desconoce cuándo los trabajadores europeos de la entidad podrán volver sobre el terreno.

"Los turistas franceses están volviendo al país tras la liberación de Roque Pascual y Albert Vilalta", ha indicado, señalando que los "rebeldes tuareg"--como se conoce a los miembros de Al Qaeda en Mali-- se concentran el norte del país, por lo que los trabajadores locales de la entidad no perciben el riesgo. No obstante, ONG humanitarias en Malí hace un año que no se pueden desplazar al norte del país por el peligro que supone, ha apuntado.

En la misma línea que Sgordati, ha subrayado que la seguridad se basa en integrarse en la comunidad, hablando su lengua y aceptando sus costumbres. Así se reduce mucho la posibilidad de que te agredan, ha asegurado, y ha sentenciado: "Si llegas como un rey mago aceptarán tu ayuda, pero es una provocación".