Dos empresarios declaran que en la cena con Blanco «cocinaban»

MADRID- En abril de 2010 se celebró una cena, conocida como «la de las truchas», con «10 o 12 amigos empresarios» en el domicilio de Javier Rodríguez, socio de Jorge Dorribo –quien aseguró haber pagado comisiones al ex ministro José Blanco para que realizara diversas gestiones ante los ministerios de Economía y Fomento–, a la que asistió el último portavoz del Gobierno de Rodríguez Zapatero. Tanto el anfitrión como José Antonio Espiñeira, socio de Manuel Bran, primo político del ex ministro, aseguraron al juez del Tribunal Supremo José Ramón Soriano que desconocían los temas que se abordaron en ese encuentro gastronómico, pero que, en todo caso, «se habló de temas de actualidad», frase idéntica en ambos comparecientes.

Y no deja de resultar llamativo igualmente el motivo esgrimido por ambos a la hora de «lanzar balones fuera» sobre lo que se comentó en esa cena: los dos no oyeron prácticamente nada de lo que los empresarios hablaron con Blanco porque ambos se dedicaban a las cuestiones logísticas, es decir, a todo lo relacionado con la cocina y el menú que degustaron los asistentes. «No recuerda las conversaciones de la cena porque el declarante –Javier Rodríguez– se dedicó a servir la comida y hacerla y la cocina estaba en el sótano».

Algo muy parecido a lo que declaró el socio del primo del ex ministro de Fomento: «Estuvo cocinando y no habló con el ministro en el tiempo que estuvo».
Tercera «coincidencia» en las declaraciones de los dos imputados: pese a que ambos se dedicaban a cocinar, no dudaron en asegurar que nadie de los asistentes, todos empresarios excepto el ministro, «habló de temas empresariales», en palabras de Espiñeira; «no se habló nada de cuestiones de empresas», en palabras del socio de Dorribo.

Y cuarto punto en el que no existió discrepancia alguna: la invitación se realizó a través de Manuel Bran. Por otro lado, el socio del primo de Blanco, que aseguró que se enteró de la reunión de Dorribo con Blanco «por los periódicos», sí quiso dejar claro que no tiene relación alguna con supuestos pagos de comisiones al ex ministro, ni que en ello haya intervenido la empresa que tenía con Bran. «Nunca han sido tapadera de pagos efectuados al sr. Blanco», aseguró en este punto.

Sin embargo, sí reconoció que realizaron dos trabajos, «sólo de electricidad», en Andorra para la empresa Salut e Innovació, de la que es accionista mayoritario Dorribo, aunque las facturas eran «tan ajustadas» que uno de los presupuestos fue rechazado y se vieron obligados a rebajarlo.

Por su parte, Javier Rodríguez, consejero de Proitec y socio de Dorribo, aseguró que el cometido que tenía era «conseguir las licencias de obras» y pasarles los expedientes a los de Asesoría «para el tema de las subvenciones».

Citas en restaurantes y gusto por el lujo
En estas fotografías, distribuidas por la Agencia Tributaria, se aprecian algunos objetos de lujo que se encontraban, junto con una importante colección de coches de alta gama, en la casa del empresario Jorge Dorribo: una pistola de pistón del siglo XIX (abajo a la izquierda) y un colmillo de elefante. En las imágenes de al lado aparece el empresario tras reunirse con el concejal del PP cesado, Pablo Covián. Luego dimitiría el ex conselleiro de Industria de la Xunta, Fernando Blanco (BNG). La dimisión de Blanco nunca se produjo, pese a las peticiones del PP en este sentido.

Las perlas del sumario Blanco
«Hostia, Ése es el gran negocio»
–J. A. Orozco: «El Blanco me ha cerrado la reunión para el 1 de diciembre (de 2010) y me dice: "¿Vas a venir con alguien o vas a venir solo?", y le dije yo: "Pepe, joder, yo voy como tú me digas. La persona con la que estamos desarrollando esto es Jorge Dorribo (...) No hay ningún problema, al contrario, encantado de que venga, pero prefiero que vengas solo, que quiero comentarte un tema». «Lo del Sigre pues... El tema que es yo ya sé lo que va a ser, que es poner... la "gallina"para el asunto de las municipales (...)».
–J. Dorribo.: «Vale, no hay problema».
–J. A. O.: «Vale, entonces».
–J. D.: «(...) Lo que sí es importante, joder, es que él en eso se moje, porque macho, eso él... la hostia».
 –J. A. O.: «Ése, ése es el tema, y (...) que sepas...»
–J. D.: «Olvidaros, que todo lo demás no son migajas, no, porque de migajas nada tiene, nada de migajas, pero hostia, ése es el gran negocio».

«Hice esa gestión con economía»
–J. Blanco:«Hice esa gestión con Economía ¿eh?La que me has pedido el día que estuvimos allí en el despacho, yo creo que será positiva, pero bueno, aún no me contestaron, ¿eh?».
–J. A. Orozco.: «Perfecto».
–J. B.: «Yo creo que será positiva, pero bueno, aún no me contestaron, ¿eh?».
En otra conversación, Blanco habla con Orozco, que tiene problemas para construir unas naves en Sant Boi de Llobregat (Barcelona).
–J. B.: «¿Y el alcalde es nuestro?»
–J. A. O.: «Sí, es vuestro, es del PSC, ¡joder!»
–J. B.: «Te hago una gestión, te hago una gestión y te recibe ése (...) No hay ningún problema (...) Yo hablo con ellos».

«Siempre es bueno tener un amigo en el gobierno»
En otro corte, Orozco detalla la naturaleza de su relación con el entonces ministro portavoz.
–J. A. Orozco.: «Yo procuro no quedar en un sitio donde se nos pueda ver (...) Siempre en lugares de poco tránsito (...) Y él me va arreglando las cosas... (...) Siempre es bueno tener un amigo en el Gobierno de tu país».