España no encabezaría la tasa de paro de la UE con la teoría de Zapatero

La lección magistral sobre lo que se considera empleo y desempleo que impartió el presidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero hace dos días en Oslo, ha levantado una auténtica polvareda de declaraciones y críticas y ha obligado a miembros del Gobierno a matizar las palabras del presidente. Si según la teoría que defendió Zapatero en Oslo los desempleados que están recibiendo formación no deberían considerarse como tal porque están «trabajando para el país», significaría que un total de 790.000 personas que en estos momentos reciben formación reglada (universitaria) y no reglada (cursos de formación de los servicios públicos de empleo), no computarían como parados. El Gobierno vería así como la tasa de paro se reduciría en cuatro puntos, desde el 20,05% registrada en el segundo trimestre (4.654.000 desempleados totales), según datos del INE, hasta el 16,6%. Nos colocaría en niveles anteriores a la crisis y España dejaría de encabezar la tasa de paro de toda la Unión Europea.

El polémico y poco afortunado comentario de Zapatero sobre los parados cobró ayer protagonismo en el Senado. Y es que el portavoz del PP, Pío Garcí­a-Escudero, no dudó en utilizarlo como arma arrojadiza en su primer cara a cara con el jefe del Ejecutivo tras las vacaciones. Cierto es que en su primera alocución en la Cámara Alta, el presidente del Gobierno reconoció que la «brecha más grave está en la tasa del paro», claro que de ahí­ a convencer a todo un auditorio de que un parado en formación es un trabajador en activo... Así­, no es de extrañar que Garcí­a-Escudero le preguntase a Zapatero: «¿Es que usted toma a los parados por tontos?» para, acto seguido, atacar al presidente donde más le duele, en las cifras. «Somos lí­deres absolutos en todas las categorí­as de paro en la Zona Euro, en cifras totales, en paro femenino y en paro juvenil», señaló el dirigente popular, en un ir y venir de datos que resultaba complicado hasta seguir. Una situación de la que todo el mundo es consciente, en palabras del portavoz del PP, salvo Zapatero que se «empeña en maquillarlo y camuflarlo de manera burda».

El portavoz parlamentario de CiU, Josep Antoni Duran i Lleida, calificó de «sorprendente» y «extraña» la consideración de Zapatero hacia los parados que realizan cursos de formación.
Duran i Lleida reclamó a Zapatero que acuda al Congreso a explicar su particular visión sobre el mercado laboral. También habló de las opiniones de Zapatero el portavoz de ERC, Joan Ridao, para señalar que sus declaraciones de Oslo no son sólo una «contradicción» y una «frase inverosímil», sino que también denotan el «vano intento de maquillar la realidad» ante los organismos internacionales de alguien que «arrastra un 20% de paro». El presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), Lorenzo Amor, tildó de «broma de mal gusto» las palabras de Zapatero, al tiempo que ironizó con que «habrá que poner en la oficina del INEM el Todo por la Patria».

Mientras el portavoz parlamentario del PSOE, José Antonio Alonso, aseguraba ayer que las palabras de Zapatero, son una «declaración política» en defensa de la formación de desempleados «y nada tiene que ver con el cómputo de los parados».


«Todos están en las estadísticas»
El ministro de Trabajo e Inmigración, Celestino Corbacho, aseguró ayer que el Gobierno que preside Rodríguez Zapatero no ha sacado de las estadísticas «ni un parado más, ni uno menos, de los que sacaba el PP», dado que la norma que rige el recuento data de 1985. Así lo señaló el ministro durante la sesión de control en la Cámara Alta en respuesta a una pregunta de la senadora «popular» Araceli Peris Jarque, sobre la situación de los autónomos. Corbacho ha instado a la bancada popular a modificar la normativa si alcanzan el Gobierno, aunque considera que este hecho no será necesario.