Investigación científica
Células bellas
La nueva línea de tratamiento de Fridda Dorsch con células madre vegetales nace tras largas investigaciones científicas, dónde se demuestra que al ser procedentes de la variedad de manzana suiza Spätlauber contiene factores epigenéticos similares a los de las células madre humanas.
El poder de estas células, combinado por primera vez con un innovador sistema al vacío, garantiza una mayor eficacia del tratamiento, preservando los activos de la oxidación, contaminación y toxinas, que bloquean la extraordinaria función de las células madre en la piel.
La manzana Spätlauber es famosa por su conservación prolongada sin encogimientos. Contiene ingredientes esenciales que aseguran la longevidad celular de los metabolitos. Sabemos que las células madre de la piel pueden morir o dañarse por las radiaciones ultravioleta o el estrés y por el contrario, si se cuidan, rejuvenecen su entorno.
Tejidos dañados
Investigaciones científicas de última generación, coinciden en la importancia de centrar sus estudios y desarrollos en las células madre embrionarias, por su demostrada eficacia en el ámbito de la medicina así como de reparación de todo tipo de tejidos dañados.
Según la directora de Fridda Dorsch, Coral Márquez, «las células madre tienen una capacidad ilimitada de autorrenovación. Las células madre son capaces de construir una epidermis completa en 3D, es decir con todas sus capas».
Sobre los beneficios de la nueva línea de tratamiento «Stem Cells», la directora de la empresa dermocosmética dijo que «protegen la longevidad de las células madre de la piel. Promueven la formación de tejido nuevo y mantienen la piel joven por más tiempo». Ahora ya sabemos también que la belleza tiene otro tránsito. El de las manzanas a la piel. Seguro.
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