Andalucía
Igor Antón: «Qué bien estoy»
Purito andaba nervioso en los últimos días. Quería vestirse de rojo, ser el mejor de la carrera, aunque sólo fuera un rato. «Me hubiera gustado llegar como líder a casa», explica; «llegar líder a Cataluña». La oportunidad se le escapó en el Xorret y de nuevo en Alcoy.
Cuestión de ansiedad, parecía. Pero Joaquín Rodríguez, Purito, para todos, se explica. «No he podido cumplir el objetivo y me quedé un poco chafado. Me ha dado pena», reconoce. «Pero a partir de ahora cambiará mi manera de correr». Ahora el objetivo es llegar a Madrid con los mejores, disputar la victoria final. Y para eso es decisiva esta semana. «Hay 19 tíos en dos minutos, pero estos días empezará a aclararse la carrera», advierte. «El tríptico del norte es bestial», dice. Sobre todo los finales en Lagos de Covadonga y Cotobello.
Purito ha perdido las prisas, pero Igor Antón ha encontrado las ganas de seguir vistiendo de rojo. El ciclista de Euskaltel no tenía como objetivo probarse el maillot rojo tan pronto. Se lo hubiera cedido encantado a Purito en Xorret de Catí. Pero ahora ya no quiere soltarlo.
«Una cosa es que no tuviéramos demasiado interés en llevarlo tan pronto, y otra es que ahora que lo tenemos lo vayamos a regalar», confiesa Gorka Gerricagoitia, el director deportivo del equipo vasco. «Teníamos claro que queríamos defenderlo, pero sin volvernos locos», reconoce Antón. «Nunca hay que desprenderse del maillot de líder», añade.
A Igor le marchan las piernas y la cabeza le ha mejorado. Hasta ahora, tres semanas se le hacían eternas, pero ahora ha aprendido a manejarse día a día. Sin agobios, sin pensar que todavía le quedan dos semanas para espantar enemigos. «No pienso en lo lejos que queda Madrid.
Pienso: ‘‘Qué bien estoy''». Igor está respondiendo bien y se gusta. «Estoy sorprendido», dice. Pero no hay casualidades en su rendimiento. Euskaltel ha preparado la Vuelta mejor que nunca, ha estudiado los finales y sabe dónde puede hacer daño Antón.
«Muchas etapas nos quedan cerca de casa. Pero las de Andalucía y Alicante también las hemos estudiado. Eso fue decisivo para ganar en Valdepeñas de Jaén», reconoce. Aunque pensaba que acababa 200 metros antes y tuvo que hacer un sobreesfuerzo al final.
Antón se ve con fuerzas para llegar de rojo a Madrid. «El recorrido me va bien», asume. Pero no se fía de Nibali y Mosquera. A Purito le sobra el italiano entre los favoritos. «No ha demostrado nada», dice. Pero los dos coinciden en la sorpresa: Xavi Tondo.
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