Los «indignados» obligan a posponer un acto del candidato en Valencia

Versión A: el secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, llamó ayer a Rubalcaba para aconsejarle que no se desplazara hasta la capital del Turia hasta que los ánimos estuvieran más calmados, ya que los «indignados» había convocado una concentración frente al hotel donde se iba a celebrar el acto con los militantes. Todo esto un día después de que la Policía cargara en Valencia contra algunos incontrolados que provocaron a los agentes que vigilaban la entrada de los diputados a las Cortes. El día acabó con 18 heridos y cinco detenidos que fueron puestos en libertad pasada la medianoche del jueves.
Versión B: la dirección federal del PSOE comenzó a valorar la posibilidad de posponer el acto en Valencia desde el mismo jueves porque el vicepresidente entendía que su presencia podía entenderse como una provocación hacia un movimiento, cuyas concentraciones el Gobierno intenta desactivar «con inteligencia». Así que fue el mismo candidato el que tomó la decisión de no acudir a Valencia, tras hablar con el líder de los socialistas valencianos. Un ejemplo de que la cartera de Interior puede ser desde ya incompatible con la agenda del candidato.