Marbella

Un pueblo andaluz de lujo

Junto a Marbella, en medio de un campo de golf, se alza Finca Cortesín, un resort de cinco estrellas que atesora todo lo necesario para entretener al huésped: deporte, spa, cocina de autor, trato personalizado... 

Un pueblo andaluz de lujo
Un pueblo andaluz de lujolarazon

Entre Marbella y Sotogrande, a los pies de Sierra Bermeja, se alza un coqueto pueblecito de aire andaluz con paredes blancas y sombreados porches y patios: Finca Cortesín. Pero no es un pueblo cualquiera, todo lo contrario. Se trata de una finca de lujo de más de 215 hectáreas en cuyo interior se esconde un hotel de cinco estrellas de esos que quedan grabados en los cinco sentidos.
El perfume a hierba recién cortada, a mar Mediterráneo y a azahar dan la bienvenida al viajero, pues el alojamiento está rodeado de un campo de golf de 18 hoyos salpicado de olivos, encinas, algarrobos y adelfas. Sin pasar por alto el exuberante jardín que bordea las piscinas exteriores de 35 y 50 metros.
Al cruzar el hall, la sensación de amplitud, brillo y frescura llama la atención del huésped, gracias a un diseño sencillo, pero muy elegante que también se deja sentir en las 67 luminosas habitaciones completamente equipadas y plagadas de detalles. Para dar rienda suelta al placer de descansar y dejarse mimar por manos expertas, la solución pasa por adentrarse en el spa del complejo, un santuario del relax de 2.200 metros cuadrados con vistas al mar, área termal y siete salas de tratamiento equipadas con la última tecnología de belleza y rejuvenecimiento. Y para no perder la forma, el hotel también dispone de un completo gimnasio, además de un club de tenis y pádel. Después de tanto ejercicio, para sorprender al paladar, nada mejor que sentarse a la mesa de Schilo, dirigido por el chef holandés Van Coevorden, donde se ofrece una cocina de autor, difícil de etiquetar, con influencias asiática, árabe, francesa y española que no deja indiferente a nadie. Los más clásicos no deben perderse El Jardín, de cocina tradicional española.