El regreso de Gingrich

NUEVA YORK- El ex portavoz de la Cámara de Representantes Newt Gingrich ganó las elecciones primarias de Carolina del Sur después de una semana de campaña voraz: se rectificaron los resultados de Iowa, la segunda ex mujer de este republicano concedió una entrevista bomba a la cadena ABC, el gobernador de Texas, Rick Perry, abandonó la carrera, aumentó la controversia sobre la declaración de impuestos del acaudalado ex gobernador de Massachusetts Mitt Romney y Gingrich tachó de vaga a la población afroamericana. El conservador supo capitalizar el enfado de la clase media de Carolina del Sur con la economía, el desempleo y el presidente Barack Obama. Gingrich se hizo con el 40,5% de los votos; Romney, con el 27,8%; el ex senador Rick Santorum, con el 17%; y el congresista Ron Paul, con el 13%.

«El pueblo estadounidense tiene la sensación de que las élites han intentado que dejemos de ser estadounidenses. Pero no [he ganado] por ser bueno en los debates, sino por ser capaz de articular los sentimientos más profundos del pueblo estadounidense», indicó Gingrich.

Al día siguiente, el ex portavoz de la Cámara de Representantes estuvo en todos los espacios de política de las televisiones del domingo, excepto en el de la ABC, que emitió una entrevista dos días antes de las elecciones primarias con su segunda esposa, Marianne, en la que indicó que el conservador le pidió tener «un matrimonio abierto». Mientras, Santorum y Ron Paul anunciaron que no se van a dar por vencidos.

Por su parte, Romney reconoció que «no me arrugo ante la competición. Creo que nos hace mejor», explicó a sus votantes la noche de la derrota. Gingrich ganó la confianza del electorado de clase media y gran parte de los votantes evangélicos, mientras Romney consiguió acaparar los condados donde predominan los votantes que ganan más de 200.000 dólares al año. Si bien es cierto que Gringrich se hizo con el favor de los votantes que representan a la base republicana, Romney de momento es el favorito. Tiene más dinero, mejor estructura de campaña y más atractivo ante los votantes independientes. Para muchos miembros y votantes de la agrupación conservadora, la importancia de estas elecciones no reside en elegir al candidato que represente mejor los valores republicanos, sino al que esté más capacitado para derrotar a Barack Obama.

Ahora que Gingrich ha conseguido la victoria de este estado del sur, los tres candidatos miran a Florida, cuyos votantes deciden el martes 31 de enero. Este estado es muy grande y diverso, pero también muy conservador. Allí Romney tiene una sólida campaña y Gingrich tendrá que demostrar si es capaz de capitalizar la victoria de este fin de semana en Carolina del Sur, donde al fin y al cabo jugó en casa. Ha representado a Georgia, el estado vecino donde estudió, durante años en el Congreso. Ayer, Romney reaccionó de forma inmediata a esta derrota. Su campaña anunció que el martes, después del importante debate de hoy en Florida, hará pública su declaración de impuestos.

La victoria de Santorum en Iowa, la de Romney en New Hampshire y la de Gingrich en Carolina del Sur hacen de esta carrera una lucha muy abierta. Es la primera vez desde 1980 que un candidato diferente se hace con cada uno de estos tres estados. Los resultados de Carolina del Sur evocan la gran batalla que hace cuatro años libraron por la nominación del Partido Demócrata Obama y la secretaria de Estado, Hillary Clinton. Algunos analistas han pronosticado que no se conocerá al candidato republicano hasta la Convención Republicana de Tampa en agosto.

Las citas de un año decisivo
31 DE ENERO: FLORIDA
Estado decisivo por la paridad entre votantes republicanos y demócratas. Un tema importante es Cuba.
6 DE MARZO: SUPERMARTES
Votaciones en diez estados. Quien gane este día tendrá todas las papeletas para hacerse con la victoria final.
8 meses
para la Convención Republicana en Tampa (Florida), de donde saldrá el ganador.
6 DE NOVIEMBRE
Se celebran las elecciones presidenciales en la que el ganador de los comicios republicanos se enfrentará con Obama.