África

Trinidad Jiménez

Los 27 defienden su «unidad»

La mayoría de ministros de Asuntos Exteriores de la UE ha defendido "la unidad"en el seno de los Veintisiete contra el régimen de Muamar Gadafi y han insistido en que la Liga Arabe mantiene su apoyo a la intervención de una coalición de países en Libia para hacer cumplir la resolución 1.973 del Consejo de Seguridad de la ONU, algo que ha puesto en duda Alemania.

El ministro alemán de Exteriores, Guido Westerwelle, ha considerado que su Gobierno, al abstenerse de participar con militares en la intervención en Libia, ha "actuado bien"después de las críticas a la forma en la que se ha lanzado la operación militar expresadas este domingo por el secretario general de la Liga Arabe, Amr Musa. Sin embargo, ha dejado claro que el Gobierno alemán respeta "totalmente"la decisión de "otros países"de intervenir.

Los ministros de Exteriores luxemburgués y finlandés, Jean Asselborn y Alexander Stubb, han defendido "la unidad"de la UE contra el régimen de Gadafi y han rechazado divisiones entre los europeos. Asselborn ha asegurado que los Veintisiete han dejado claro su "gran solidaridad"para "impedir que Gadafi continúe masacrando a su pueblo", mientras que Stubb ha insistido en "la unidad"contra el régimen y la necesidad de que ponga fin a la violencia.

Westerwelle ha reiterado el "escepticismo"de Alemania de participar en una operación militar porque entiende que hay que ser "muy precavidos"teniendo en cuenta "los riesgos"potenciales para la población civil sobre el terreno y ha considerado que las críticas de la Liga Arabe constituyen "un mensaje importante".

"Creo que tenemos buenas razones", ha recalcado el ministro alemán, que sin embargo ha dejado claro que esta postura no significa que apoye al régimen de Gadafi. "Que no participemos no significa que somos neutrales ni que apoyamos a Gadafi", ha insistido.

La Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Catherine Ashton, ha restado importancia a las críticas expresadas por Musa insistiendo en que la prensa le ha misinterpretado y que él mismo ha corregido estas críticas y además ha insistido en que Musa fue "muy claro"el sábado pasado en la cumbre convocada en París por el presidente francés, Nicolas Sarkozy, sobre la necesidad de "ofrecer apoyo"para proteger al pueblo libio.
"Entiendo que Amr Musa ha sido malinterpretado y que lo ha corregido", ha declarado a la prensa a su llegada al Consejo de Ministros de Exteriores de la UE que hoy continúan discutiendo sobre Libia.

El ministro de Asuntos Europeos británico, David Lidington, ha defendido la legalidad de la misión insistiendo en que está respaldada por una "resolución"del Consejo de Seguridad de la ONU.

La ministra de Exteriores danesa, Lene Espersen, ha asegurado que ha mantenido contacto con un portavoz de la Liga Arabe que le han garantizado el "total apoyo"del organismo regional con sede en El Cairo.

"Todavía mantienen total apoyo a las decisiones que se tomaron el sábado en París. La Liga Arabe, como el resto de nosotros, está preocupada por si hay bajas civiles, así que hay que centrarse en proteger a los civiles", ha asegurado.

Papel de la OTAN

La ministra ha subrayado la necesidad de "cumplir"la resolución 1.973 del Consejo de Seguridad que, entre otros, autoriza a establecer una zona de exclusión aérea y aplicar un embargo de armas para impedir que el régimen de Trípoli continúe bombardeando a su población y ha dejado claro que Dinamarca, que ya tiene varios F-16 sobrevolando Libia junto a las fuerzas de otros países de la coalición de fuerzas que se gestó el sábado para hacer cumplir dicha resolución apoya "mucho"que la OTAN participe en la intervención.

"Apoyamos mucho que la OTAN desempeñe un papel y que los Estados miembros que todavía tienen algunas preocupaciones sobre la resolución de la ONU se convezcan de que es importante que la OTAN desempeñe un papel, no sólo para garantizar que se cumple la zona de exclusión aérea sino también en relación con la aplicación del embargo de armas y en la asistencia humanitaria, en la que la OTAN está planificando ya desde hace un tiempo", ha explicado.

Alemania, Turquía y Francia todavía mantienen ciertas reticencias a una participación de la OTAN en un país musulmán como Libia.

El ministro de Exteriores italiano, Franco Frattini, ha defendido la necesidad de "verificar"el alto el fuego y que las operaciones de la coalición internacional son "consistentes"con la resolución de la ONU y ha confiado en que los Estados miembros "compartan la carga muy grande de la inmigración ilegal"de ciudadanos que abandonan la región huyendo de los combates.

"Rechazamos absolutamente ir más allá de la estricta implementación de la resolución", ha dejado claro, al tiempo que ha defendido que "es el momento de pasar de una coalición a una coordinación en la OTAN"que, en su opinión, tiene "la capacidad y la experiencia para dirigir"la intervención militar en Libia.

Los ministros de Asuntos Exteriores holandés y luxemburgués, Uri Rosenthal y Jean Asselborn, respectivamente, han defendido la necesidad de "clarificar"quién hace qué en la intervención en Libia.

El holandés ha subrayado su deseo de que "se aclaren algunas cosas"para que se tenga claro "quién va a hacer qué, cuándo y cómo en Libia"y también ha subrayado que espera que "también la Liga Arabe participe en la ejecución de la resolución 1.973 del Consejo de Seguridad".

Asselborn ha defendido que "hasta ahora no hay señales de que la coalición que está sobre el terreno en el aire haya sobrepasado el mandato", que es "claro"a la hora de autorizar utilizar "todas las medidas"para proteger a la población civil y también ha subrayado que espera que países como Qatar y Emiratos Arabes Unidos puedan participar en la operación.

"Esta operación no es contra el pueblo libio. Al contrario, es para quitarse de encima a alguien que ha bombardeado, torturado y asesinado a su pueblo", ha insistido el luxemburgués, que sin embargo si se ha mostrado partidario de "clarificar ahora"si la intervención correrá a cargo de la coalición de países gestada o la OTAN. "Tenemos que elegir rápidamente si la coalición con algunos países es la que hace la operación o la OTAN", ha insistido.

Por su parte, el ministro de Exteriores chipriota, Markos Ciprianu, ha subrayado la necesidad de que "el alto el fuego sea respetado por todo el mundo en Libia". "Es decir, que todo el mundo deje de disparar contra todo el mundo", recalcando que "el objetivo"no debe ser "acciones militares". "Tenemos que encontrar una manera, a través del diálogo pacífico", ha insistido, una postura que ha apoyado el titular de Exteriores sueco, Carl Bildt. "Tiene que haber una solución", ha insistido.

La ministra de Asuntos Exteriores y Cooperación, Trinidad Jiménez, ha recalcado hoy que la intervención militar en la Libia de los países aliados cumple "en todo momento"lo establecido "expresamente"por la resolución de Naciones Unidas, y por ello ha confiado en "poder contar y seguir contando con el apoyo"de la Liga Arabe y ha considerado que "tiene más sentido que sea esta coalición de países los que continúen"adelante con la intervención "sin excluir el apoyo, como ya está haciendo la OTAN, sobre todo con el embargo de armas", cuyo plan operativo fue acordado este domingo por los embajadores aliados.