Rajoy habla ya de su Gobierno y da por acabado a Zapatero

La estrategia preelectoral del PP sigue la senda del «arriolismo» y sigue centrada en «golpear» la gestión económica del Gobierno. Pero cada día exige también ir añadiendo complementos al argumentario, y ahora toca vender optimismo y confianza en las posibilidades del país, en la medida en que «ni Zapatero ni su Gobierno son eternos y volverá la ilusión, el empleo y la recuperación económica».

El PP anda ya engrasando su maquinaria electoral para las autonómicas y municipales del año que viene, unos comicios a los que se presentarán con un estudiado mensaje en clave nacional pensando para la clase media desengañada con las políticas socialistas. «Vamos a trabajar para no tener que andar demandando ni ayudas ni rescates ni vivir en permanente sobresalto», sentenció en la clausura del cónclave municipal que durante dos días ha celebrado el PP en Zaragoza.

Precisamente, la financiación de los ayuntamientos será uno de los caballos de batalla de la precampaña electoral. Son muchos los gobiernos municipales que están en práctica situación de quiebra técnica y que silencian como pueden los agujeros de sus balances para ver si pueden engañar a las urnas sin tener que pagar un coste. Pero como en esta materia también hay una responsabilidad del Gobierno, por su erratismo y sus promesas incumplidas, el PP ha visto dónde morder y no tiene intención de soltar la presa. De momento, del cónclave popular sale la decisión de retomar la ofensiva en esta materia tanto en el ámbito parlamentario como político.

Rajoy anunció que el PP presentará una iniciativa en el Congreso para se autorice a los ayuntamientos a «refinanciar su deuda», igual que lo hacen las comunidades y el Estado, y para que el ICO conceda créditos a las corporaciones que lo necesiten para pagar a sus proveedores.