Colombia

El TS archiva la última causa a Garzón al haber prescrito por 23 días

El TS archiva la última causa a Garzón al haber prescrito por 23 días
El TS archiva la última causa a Garzón al haber prescrito por 23 díaslarazon

MADRID- Baltasar Garzón tiene desde ayer un quebradero de cabeza menos. Tras una «semana negra» con la condena a once años de inhabilitación por ordenar las escuchas en prisión a los principales imputados del «caso Gürtel» y sus abogados, el juez suspendido recibió al fin una buena noticia: el archivo de la última de las tres causas abiertas contra él en el Tribunal Supremo (TS). Y es que 18 días después de imputar a Garzón un delito de cohecho impropio por los patrocinios de sus cursos en Nueva York en 2005 y 2006, el magistrado Manuel Marchena acordó ayer el archivo de las actuaciones al considerarlas prescritas, tal y como defendían la Fiscalía y el abogado de Garzón, Enrique Molina.

Con el calendario en la mano, el último de los pagos efectuados al imputado por parte del BBVA para esos cursos se realizó el 17 de mayo de 2006. El delito de cohecho impropio prescribía a los tres años –cinco desde la reforma de junio de 2010, que no afecta a Garzón al ser posterior al momento de la comisión de los hechos investigados y resultar menos favorable para él– y la querella que contra el entonces juez de la Audiencia Nacional se presentó el 12 de junio de 2009, por tanto, 25 días después de que prescribieran los hechos.

Querella anterior
Únicamente había un resquicio para descartar que la prescripción se hubiese producido: considerar que ésta se había interrumpido con la presentación de una querella anterior formalizada el 10 de julio de 2008 (antes de que se cumpliesen los tres años). Pero el instructor niega esa posibilidad dado que «no llegó a ser admitida a trámite». Y aunque reconoce que es una cuestión «controvertida»
jurisprudencialmente, añade que cuando el TS ha considerado suficiente la presentación de una querella para interrumpir la prescripción siempre se ha tratado de denuncias que posteriormente sí fueron admitidas a trámite.

Lejos de pasar por alto los indicios contra Garzón, el magistrado del Supremo afirma que el deber de abstención que le incumbía al declararse competente para investigar una querella contra directivos del BSCH –entidad que previamente había colaborado en el patrocinio de sus cursos en Nueva York– fue «conscientemente infringido en gratitud por la generosa respuesta» a su petición de ayuda económica.

Marchena va incluso más allá al añadir que el entonces juez de la Audiencia Nacional «consideró oportuno ocultar al fiscal y a las partes la concurrencia de una causa que podría perturbar su imparcialidad». De esta forma estaba demostrando, concluye, «que el deber de agradecimiento generado por la dádiva interfería ya el ejercicio íntegro de su función jurisdiccional».

No obstante, el instructor descarta –como pedía la acusación popular– que Garzón cometiese los delitos de prevaricación (de haber sido imputado por éste la prescripción, de 15 años, aún no se habría producido), extorsión y asociación ilícita. Marchena habla de la «metodología recaudatoria puesta en marcha por Garzón» (por la que obtuvo 1.237.000 dólares de los 2.595.375 que pidió), pero dice que esa «censurable estrategia de persuasión» no puede considerarse intimidatoria.

 

Lo que dice Marchena
1 «El dinero entregado a petición del quere- llado e ingresado en las cuentas de la Universidad de Nueva York lo fue en consi- deracion al cargo jurisdiccional de Baltasar Garzón».
2 «La utilización de un sobre con membrete oficial (...) encaja perfectamente en la metodología recaudatoria puesta en marcha por Garzón. Ese sobre habla por sí solo de quién pedía el dinero y en atención a quién se concedían los fondos».
3 «Contactó con responsables de distintas empresas españolas reclamando ayuda económica para la celebración de cursos en los que aparecía como director. Todas tenían en común el haber sido objeto de investigación por hechos imputados a sus directivos en el propio juzgado del que era titular o en otros de la Audiencia».
4 «Debiendo abstenerse, consideró oportuno ocultar al fiscal y a las partes la concu- rrencia de una causa que podría perturbar su imparcialidad».

 

A la espera Del veredicto del franquismo
Es la última batalla judicial que le queda a Baltasar Garzón y una de las más mediáticas. El pasado jueves, el juicio por declararse competente para investigar los crímenes del franquismo quedó visto para sentencia. Garzón se enfrenta hasta a 20 años de inhabilitación, aunque él mismo declaró tener la conciencia tranquila ante una sentencia que podría conocerse en los próximos días.
 

Ofertas de trabajo desde Suramérica para el «héroe»
Baltasar Garzón trabajará, a partir de mayo, para la Organización de Estados Americanos (OEA) en Colombia, según informó ayer el diario «El Tiempo», según el cual el ex juez español tendrá oficina en Colombia. El diario bogotano asegura que Garzón, que ha seguido de cerca el proceso de paz con los paramilitares colombianos, ya no irá al país suramericano como asesor del Gobierno, que era el plan inicial, sino que trabajará con la OEA en la misión de apoyo que ese organismo multilateral envió al país en 2005 para verificar el desarme paramilitar. Los detalles para la llegada de Garzón se están perfilando en Washington, donde la OEA tiene su sede. La decisión, según «El Tiempo» se ha concertado con el Gobierno del presidente Juan Manuel Santos