España recupera el tono

«¡Iniesta de mi vida!», gritó Camacho en Ellis Park (11 de julio de 2010, Johannesburgo). Fue el grito del Mundial, el de la gran victoria, el de la emoción indescriptible, el del homenaje a un futbolista sensacional; todavía se escucha el eco. Iniesta condujo a España, otra vez entonada, hasta la victoria en 45 minutos primorosos; lo hizo todo, incluso marcó. Silva, futbolista excepcional, le dio cumplida réplica. En la segunda mitad entró Soldado, tres goles más. También jugó Muniain, un «veterano» de 19 años.

Cuesta trabajo reconocer a España envuelta en ese azul celeste de los años 60 que ha invadido el imperio rojo por imperativos de la mercadotecnia, hasta que el balón lo coge Iniesta, o cuando llega a los pies de Silva, entonces la Selección resulta inconfundible, perfectamente identificable, porque el placer de ver jugar a esta pareja, sea cual fuere el color de la indumentaria, es único. Y seguro que no fue casual que el primer tiempo terminara con dos goles excelentes de ambos talentos.

Pidió Vicente del Bosque antes del partido que había que cuidar a la Selección, no de los golpes naturales durante cualquier encuentro, sino del entorno, de los «clásicos» litigios, del calendario... Venezuela se ocupó de que el físico de su anfitrión no corriera riesgos gratuitos. Era un amistoso, que la «Vino tinto» afrontó con elegancia y carácter, más firme que en Santa Marta, hasta que su esquema se desmoronó después de varios y cada vez más contundentes empujones.

De salida, la Selección compareció con un aspecto familiar; si acaso extrañaba la presencia inicial de Fernando Llorente, aunque era lógica. El del Rincón de Soto fue un referente en la delantera, pero no anduvo fino. Le faltó acierto goleador, control, el remate efectivo, aunque dispuso de varias ocasiones. Cuando parecía que Villa e incluso Torres, 78 goles entre ambos (51 y 27) son después de todo insustituibles, apareció la segunda línea. Iniesta ya había dado muestras de calidad; no acusaba la ausencia de Xavi, al contrario, creció y se convirtió en el punto de apoyo que mueve el equipo, en el tamiz, en el distribuidor y, finalmente, en el realizador. Abasteció de balones extraordinarios y se sirvió de Busquets y Cesc para hacer el 1-0. Combinación meteórica, un triángulo que los venezolanos, que empezaron bien y terminaron abrumados, no olieron. Tampoco intuyeron el 2-0, de Silva, un disparo ajustado al poste, como el otro, colocado.

Algo más de media hora tardó España en doblegar al equipo venezolano, que ya no contragolpeaba, que ya no presionaba la salida del balón desde la defensa contraria, que bastante tenía con defenderse. Sí, la selección que ganó 1-0 a Argentina en la clasificación para el Mundial de Brasil en 2014, desaparecía entre el fútbol bullicioso, preciosista y uniformemente acelerado del campeón del mundo, que de nuevo dio muestras de serlo, aunque se trataba de un partido amistoso.

Después del descanso, Soldado relevó a Llorente y Cazorla a Iniesta. España perdió el placer de ver jugar al azulgrana, pero ganó con el estimable olfato de gol del «9» valencianista. El primer balón que tocó lo mandó a la red, de tacón, a centro de Cazorla. Era el minuto 50, tres después hizo el 4-0, a pase de Arbeloa, y algo más tarde falló un penalti que le hizo Amorebieta y se fue a la calle. Frente a diez la Selección tampoco perdió de vista la meta de Dani, asediado.

 Rondaba el quinto. Del Bosque introdujo más cambios: Xavi por Alonso, Navas –electricidad en la banda derecha, miles de centros– por Silva, práctico y delicioso, y Puyol por Ramos. «La azul celeste» no perdía estilo ni ambición –Soldado, pura dinamita, hizo el 5-0–. Hay recambios y futuro, como Muniain, 19 años, el debutante, savia nueva, una buena noticia, tan buena como el resurgir de «La Roja» azul celeste.


Ficha técnica:
5 - España: Casillas; Arbeloa, Sergio Ramos (Puyol, m.61), Piqué, Jordi Alba; Busquets, Xabi Alonso (Xavi, m.61); Iniesta (Cazorla, m.46), Cesc (Muniain, m.75), Silva (Navas, m.61); y Llorente (Soldado, m.46).
0 - Venezuela: Dani Hernández, Roberto Rosales, Amorebieta, Vizcarrondo, Quijada (Rolf Feltsher, m.72); Julio Álvarez (Alex González, m.61), Tomás Rincon, Mea Vitali (Flores,m 81), Arango (Greco, m.88); Miku (Túñez, m.66) y Rondón (Frank Feltsher, m.78).
Goles: 1-0, m.37: Iniesta. 2-0, m.40: Silva. 3-0, m.49: Soldado. 4-0, m.54: Soldado. 5-0, m.85: Soldado.
Árbitro: Andris Treimanis (LET). Amonestó a Cesc (69) por España. Expulsó por roja directa a Amorebieta (65) por derribar a Soldado dentro del área siendo último hombre.
Incidencias: encuentro amistoso disputado en el estadio La Rosaleda de Málaga ante la presencia de 25.000 espectadores