Fabra cumple ocho meses como garante de la austeridad

VALENCIA- Hace ocho meses que el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, dejó la alcaldía de Castellón para ocupar el puesto de mayor responsabilidad del Ejecutivo autonómico. En todo este tiempo, la economía ha centrado la mayor parte de sus decisiones. Ha abanderado la política de la austeridad y la eficiencia en las Administraciones Públicas, según informaron fuentes de la Generalitat.

Sólo en el ámbito económico, el jefe del Consell ha puesto en marcha una medida cada dos días, es decir, 125 iniciativas desde julio. La mayoría de ellas con el objetivo de reducir el endeudamiento público y optimizar recursos. En esta línea, en los dos últimos meses el Consell ha abonado cerca de 2.200 millones de euros a sus proveedores.

El otro eje fundamental de su política económica es la aprobación del Decreto Ley de medidas urgentes aprobado en enero con el que se prevé reducir el déficit en más de 1.000 millones de euros. A esta cantidad hay que sumarle los más de 700 millones que se ahorraron durante 2011 gracias al Plan de Ajuste que aprobó nada más asumir la Presidencia.

Todas estas medidas, según las mismas fuentes, siguen un mismo principio: la austeridad. Uno de sus primeros planes fue poner a dieta toda la Administración con el objetivo principal, además de ahorrar, de cambiar la mentalidad. En esta línea, destaca la vinculación del salario de los altos cargos a la reducción del déficit, la creación de una interventora que controlará el gasto de cada área, el establecimiento de un tope salarial para los directivos de las empresas públicas, la disminución de vehículos o el control del gasto en móviles y dietas.

Asimismo, Fabra pretende acabar con las duplicidades. El pistoletazo de salida hacia esta nueva concepción se dará en Valencia, en la Cumbre de Presidentes, que se celebrará antes de verano.