Crisis económica

Los expertos creen que el PIB caerá sólo un 09% el año que viene según PwC

La Razón
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Madrid- La economía española se contraerá un 1,4% este año y un 0,9% el año que viene, según el estudio económico de PwC correspondiente al cuarto trimestre del año, realizado a partir de la opinión de un panel de expertos y empresarios, que recoge Efe.

Casi nueve de cada diez empresarios o directivos califican de mala o muy mala la situación de la economía española y el 86,6% prevé que siga igual o vaya a peor en los próximos seis meses. Sin embargo, pese a que la mayoría de los 400 expertos que han participado en este panel de consenso siguen teniendo una percepción muy negativa de la realidad económica, se aprecia una ligera mejoría dentro de la gravedad de la situación.

El porcentaje de empresarios que piensan que la caída de la actividad será menor ha aumentado y si antes era un 32,5% los que pensaban que la economía iría a peor en los próximos seis meses, actualmente se ha reducido hasta el 21,6%.

También ha mejorado en diez puntos la percepción de los que creen que la situación será más favorable a finales del próximo año. Según el estudio, en el que ha participado la Fundación de Cajas de Ahorros, Analistas Financieros Internacionales, el Instituto de Empresa, Intermoney o el Grupo Santander, entre otras instituciones, la economía española caerá en 2012 el 1,4% y en 2013, el 0,9%.

El 46,2% de los panelistas consultados cree que la evolución del PIB español a partir de 2014 mantendrá un crecimiento por debajo del 3% durante un tiempo prolongado y el 32% considera que así seguirá hasta que se lleven a cabo reformas en profundidad del modelo económico.No obstante, la «leve» mejoría que señala el informe sobre perspectivas en los próximos meses se debe a que ha disminuido el porcentaje de encuestados que creen que la demanda de las familias seguirá deteriorándose.

 

Una UE con impuestos propios
Casi ocho de cada diez directivos, expertos y empresarios, encuestados en el estudio de PwC, insisten en que los programas creados por la UE, como el Pacto de Estabilidad, no servirán de nada si no se acompañan de una política fiscal centralizada, complementada con una política monetaria del BCE. Un 85% apuesta por una UE con impuestos propios (a costa de los nacionales).