El resurgir de la comunidad

Comenzó su andadura sin cosechar mucho interés entre los espectadores, que no podían evitar buscarle parecido con «Aquí no hay quien viva», serie en la que se inspiró y con quien compartía la mayor parte de los protagonistas. Después de un parón en su emisión que se antojaba eterno, y gracias a las repeticiones que se suceden en FDF, «La que se avecina» está viviendo ahora su etapa dorada. Ha conseguido afianzar a personajes como el gañán Antonio Recio, que goza de un amplio club de fans que ha crecido a lo largo de las temporadas. O como el tierno Amador, que con expresiones como «merengue, merengue» o «no toques, ¿por qué tocas?» puede presumir de haber conseguido el mismo fenómeno que en su día consiguió Emilio, el portero de «Aquí no hay quién viva» con «un poquito de por favor». No en vano, ambos personajes cuentan con más de 17.000 seguidores en perfiles creados por los propios fans.

En el último capítulo de la temporada, Amador finge su propia muerte para evitar que su madre le envíe de vuelta a Albacete. Por su parte, los nervios prenupciales y las continuas discrepancias sobre los preparativos de la boda han llevado a Araceli y Reyes a poner fin a su relación de pareja. Convencido de que tras este fracaso sentimental su ex mujer volverá con él, Enrique le hace una proposición insólita: casarse con él por segunda vez, iniciativa que mantendrá en vilo a los residentes de «Mirador de Montepinar».