Sin placa de Aznar

El Gobierno ha retirado la placa conmemorativa de la inauguración, por José María Aznar, de la residencia del Embajador español en Washington, debido a su «mal estado» de conservación. Así lo explicó el Ejecutivo de Zapatero al senador popular Alejandro Muñoz Alonso, quien se interesó por «los motivos de la retirada». Afirman desde el Gobierno que la placa «no era compatible con las condiciones meteorológicas de Washington» y callan cuando se les pregunta si será repuesta en su sitio. La residencia del Embajador español en la capital norteamericana, obra de Rafael Moneo, fue una apuesta personal del anterior jefe del Ejecutivo. Aznar era consciente de la importancia que para nuestro país tenía un espacio singular que diese cobijo a un diálogo más intenso con la primera potencia mundial. Ahora, se intenta silenciar aquella iniciativa de una manera miserable y burda. O, al menos, eso parece, a la vista de la desidia con que se actúa.