El jefe de la oposición laica de Turquía obligado a dimitir por un vídeo sexual

Deniz Baykal, presidente del principal partido de la oposición turca, Partido Republicano del Pueblo, de carácter laico, presentó ayer su dimisión tras la filtración de un vídeo de contenido sexual, filmado con una cámara oculta en el armario de la habitación de un hotel, en el que, supuestamente, se le ve manteniendo un encuentro con su ex-secretaria y diputada, Nesrin Baytok. El vídeo fue difundido en internet por una página web islamista, en donde apenas estuvo colgado una hora, tiempo más que suficiente para que se distribuyeran copias por todo el país.Baykal, casado y con dos hijos, denunció que ese vídeo es parte de un complot contra él y su partido por parte del gubernamental Partido de la Justicia y el Desarrollo (AKP),islamista, al que acusó de preparar un «golpe de Estado civil». En ese sentido, el jefe de la oposición denunció que el vídeo no pudo ser filmado sin la colaboración de las autoridades y pidió a todos los militantes de su formación que sigan luchando contra el AKP y sus planes de establecer una dictadura religiosa.La emisión del vídeo está siendo investigada por la Fiscalía de Ankara, aunque parece claro que la cámara fue instalada por profesionales del espionaje que, además, conocían no sólo el hotel donde se mantenían los supuestos encuentros sexuales (no hay imágenes explícitas en el citado vídeo), sino, también, el número de la habitación y la fecha de la cita. «Lo sucedido viola los derechos humanos que se respetan en todos los regímenes políticos y religiones. No busca beneficio económico, sino que tiene motivos políticos. El complot no ataca a un individuo, sino a la lucha del CHP por la democracia», dijo un indignado Baykal durante la comparecencia televisada en la que anunció su dimisión.El vídeo y la renuncia de Baykal se producen cuando Turquía está inmersa en un proceso de reforma constitucional impulsado por el Gobierno islamista y al que se ha opuesto el CHP, argumentando que implica poner a la Justicia bajo el control del Ejecutivo.El paquete de reformas fue aprobado el pasado viernes en el Parlamento con el único apoyo del partido gubernamental. El proyecto no recibió la mayoría cualificada de dos tercios, con lo que tendrá que ser ratificado en un referéndum. Las enmiendas pretenden reformar la estructura del Constitucional y del Poder Judicial, y, también, abren la posibilidad para enjuiciar ante tribunales civiles a oficiales del poderoso Ejército turco.