España

Luces y sombras

La Razón
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Lo dijo el filósofo alemán Max Stirner: «Una vez conquistadas nuestras libertades, hemos conquistado una nueva arma; esa arma es el voto». Ayer millones de españoles pudieron acudir a las urnas a ejercer el derecho y deber democráticos de votar porque en nuestro país la democracia existe. Ahora bien, lo acaecido ayer ha sido sólo un rayo de luz: los ciudadanos descontentos con la gestión de Zapatero hablaron haciendo ver que la única salida responsable de la situación actual es un cambio de gobierno. Pero no se engañen, lo que aguarda a este país en el futuro inmediato es un camino lleno de «esfuerzo, sudor y lágrimas» hasta poder ver los brotes verdes que Zapatero tantas veces prometió. En este camino habrá muchas sombras, entre ellas, la de los jóvenes que han estado manifestando su descontento en los últimos días por toda España ¿Qué les ocurre a los jóvenes? Pues que están hastiados, sin horizonte vital y sin ilusión; y lamento afirmarlo una vez más: un país con jóvenes sin ilusión carece de futuro.

La palabra y el voto
Por ello, digo a los jóvenes que se están equivocando en la forma; no es de recibo manifestarse en la calle proclamando que de nada sirve ir a votar cuando en otros países la gente está muriendo en revueltas por exigir el derecho de voto. Otra cosa son los motivos por los que se manifiestan. Ahí sí que les asiste la razón: España necesita reformas radicales en la educación, en la justicia, en el sistema electoral, en el mercado laboral, en el financiero; pero los jóvenes también han de entender que la única vía para lograr estos objetivos es mediante la palabra y el voto. Porque lo que hace grande a nuestro país es poder disfrutar de la democracia.