Bruselas

Bruselas se plantea intervenir en los presupuestos nacionales

El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, ha desvelado hoy que se plantea que la UE pueda intervenir en los presupuestos nacionales y suspender el derecho de voto de los países que no respeten las recomendaciones de disciplina fiscal, así como la creación de eurobonos, como recetas para reforzar el gobierno económico de la eurozona y combatir la crisis de deuda.

Van Rompuy ha anunciado que presentará un primer borrador con propuestas a la cumbre de líderes europeos que se celebrará a principios de diciembre. Su objetivo es que las medidas, que según ha dicho podrían requerir una reforma del Tratado, se aprueben de forma definitiva en marzo o junio de 2012.

Las propuestas tendrán una triple finalidad: reforzar la convergencia económica entre los países de la eurozona, mejorar la disciplina fiscal y fortalecer la unión económica.

Por lo que se refiere a la mejora de la disciplina fiscal, el presidente del Consejo Europeo ha explicado que se plantea si "debemos ir más allá en el automatismo de las sanciones previstas en los procedimientos de déficit excesivo"o "establecer en casos extremos nuevas sanciones como la suspensión de los derechos de votos, la suspensión de los fondos estructurales u otros pagos".

También sopesa "dar poder a una autoridad central para que intervenga en los procedimientos presupuestarios nacionales".

En cuanto al refuerzo de la unión económica, Van Rompuy estudia si es necesario una mayor armonización de los impuestos y de las políticas sociales en los países de la eurozona, así como una "mutualización limitada de la deuda pública", es decir, algún tipo de eurobonos. También ha pedido una mayor regulación del sector financiero.

 Además, Van Rompuy ha considerado que se ha "exagerado"el debate sobre la creación de una Europa a dos velocidades, y abogó por "desdramatizarlo"porque le interesa a toda la UE tener una zona euro mejor estructurada.

"Ha habido mucho debate exagerado sobre esto y es hora de desdramatizarlo. Después de todo es perfectamente normal que aquellos que comparten una moneda común tomen decisiones en común", afirmó Van Rompuy en el pleno del Parlamento Europeo.

El presidente del Consejo Europeo recordó que el Tratado de Lisboa permite este tipo de coordinación entre los 17 países de la zona del euro al incluir un capítulo con provisiones para los estados miembros con el euro y otros artículos sobre los que solamente los miembros del euro pueden votar.

"Por ello se trata de una parte perfectamente normal en nuestra organización institucional y de un método de trabajo específico", señaló.

La zona euro no es una "derogación"de la UE sino una parte de la UE, insistió, y subrayó que "les interesa a los estados miembros que no están en la zona del euro que su estabilidad financiera esté organizada y asegurada".

"Una zona euro mejor estructurada le interesa a todo el mundo, al tiempo que se asegura la coherencia entre los Veintisiete", dijo.

Van Rompuy reiteró su intención de organizar cumbres del euro "como norma"junto a las cumbres de los Veintisiete y, si es posible, siempre seguidas al Consejo Europeo, para que los miembros que no comparten la moneda común puedan expresar sus opiniones.