Con el espíritu libre de Labordeta

Le llovían los homenajes y los premios y él, con ironía, los agradecía y esperaba que pasaran para poder descansar. José Antonio Labordeta falleció la madrugada del domingo en el Hospital Miguel Servet de Zaragoza de un cáncer de próstata al que plantó batalla hasta el último minuto. Los médicos le aconsejaron que no leyera información sobre su enfermedad en internet. E hizo caso. Se dedicó entonces a experimentar las bondades del té verde, que también le habían recomendado, para sustituir a la leche, que no le sentaba tan bien como antes.

España, de punta a cabo
De todas las experiencias que vivió en sus apretados 75 años, Labordeta destacaba dos: «Del 64 al 70, cuando era profesor en Teruel, y del 90 al 99, cuando protagonizó el programa para Televisión Española ‘‘Un país en la mochila''». Recorrió España de punta a cabo, se empapó de sus paisajes y de sus paisanajes; subió cordilleras y divisó el mar, siempre tocado con una gorra y provisto de un bastón en que apoyarse. El programa se convirtió en un clásico y en un momento ya de competencia televisiva, la primera entrega del espacio, en octubre de 1995, registró una audiencia media por capítulo de más del millón de espectadores. Cinco años después, en la segunda entrega, la media se dobló. Ayer fueron muchas personalidades del mundo del espectáculo y la política quienes le recordaron y se acercaron a visitar la capilla ardiente instalada hasta esta mañana en el Palacio de la Aljafería, sede de las Cortes de Aragón. Su Majestad el Rey dijo desde Alcañiz que «era un gran amigo» y le calificó de «gran patriota». La ministra de Defensa, Carme Chacón, destacó que fue una persona honesta e íntegra hasta el final. Desde el Partido Popular, su presidenta por Aragón, Luisa Fernando Rudi, consideró que se pierde «una de las figuras relevantes de la cultura aragonesa». Nuevo Mester de Juglaría, grupo segoviano dedicado a la música tradicional española, reaccionó rápidamente a la noticia del fallecimiento y compuso una jota de despedida para un «sabio que sabía transmitir la esencia de sus raíces». El escritor Javier Tomeo, aragonés como Labordeta, recordó a LA RAZÓN que «el historiador Manuel Tuñón de Lara lo ha calificado como un referente natural de la cultura española. Durante ocho años fue el único representante de la Chunta Aragonesista en el Congreso. Se opuso rotundamente al trasvase del Ebro y defendió la apertura del corredor ferroviario por el Pirineo central. No me gustaría caer ahora en los tópicos de costumbre, pero sí quiero decir que fue un hombre honrado a carta cabal, que anduvo siempre con la verdad por delante. Yo creo que incluso sus adversarios políticos llegaron a apreciarle. En su famosa serie televisiva ‘‘Un país en la mochila'' enseñó a muchos españoles a conocer y amar a su país en toda su variedad y riqueza. Con su mochila a cuestas se nos ha ido a recorrer otro país, inmenso y misterioso, que se extiende más allá de la muerte. Los aragoneses nos sentimos ahora más solos. Me enorgullezco de haber sido su paisano». Para la cantante Carmen París «se ha ido su cuerpo, pero deja tantas cosas tan importantes, deja un poso tan importante este hombre, que la muerte es un tránsito».