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Previsiones por Gonzalo Arance

La Razón
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Es preciso ser cauto con las previsiones sobre exportaciones. La tendencia a largo plazo, exceptuando 2009 y 2010 por la crisis, nos muestra un constante crecimiento de las mismas. Aunque tarde, las empresas españolas han aprendido la lección: en una economía globalizada, si no exportas, es cuestión de tiempo que desaparezcas. Por eso, desde finales de los 90 han ido fijando poco a poco sus objetivos fuera de la UE y focalizando esfuerzos en países como EE UU, Brasil, Rusia, Japón u Oriente Medio. Se preguntarán cómo he osado no incluir a China e India. Fácil. Ambos son más interesantes para fabricar que para exportar. ¿Qué sentido tiene intentar vender en mercados en los que el 90% de la población tiene un poder adquisitivo bajo?

Un aspecto que no es baladí es la dificultad añadida que supone para España exportar a algunos mercados sin una marca país reconocida. La fortaleza del euro ha dificultado nuestras exportaciones, algo que no les ha ocurrido a países como Alemania, que poseen productos de alto valor añadido y una reconocida marca que ha hecho que sus productos sean menos sensibles al precio y que hayan seguido vendiéndose pese a la apreciación del euro. Hay que realizar un esfuerzo para lograr esa marca de calidad con la inversión en el exterior en promoción.

Las empresas deben internacionalizarse. Teniendo en cuenta que cada aumento agregado del 10% en nuestras exportaciones añade entre 200.000 y 300.000 empleos, creo que debe ser uno de los aspectos en los que hay que centrar nuestros esfuerzos.

 

Gonzalo Arance
Profesor del IEB y consultor de Comercio Exterior e Inversiones