La Cámara expulsará a fotógrafos que vulneren los derechos de los diputados

Madrid- Mal comienzo. Primera instrucción redactada por la nueva Mesa de la Cámara Baja y primera bofetada a la prensa gráfica. Que nadie piense, pese a lo que se diga, que el motivo fue una foto publicada por el diario «El Mundo» con un SMS del móvil de Alfredo Pérez Rubalcaba; la historia viene de lejos. Más allá de que la publicación de una determinada imagen sea éticamente reprobable, hace años que el Congreso viene limitando los movimientos de los gráficos en el Parlamento. Primero los edificios de la ampliación; luego las obras de reforma; después llegó la construcción de una especie de bañeras en el Hemiciclo para que no fotografiaran los papeles de trabajo de los diputados… Y ayer se aprobó una instrucción del máximo órgano de gobierno de la Cámara que anuncia la retirada de la acreditación a los fotógrafos de prensa que, al desempeñar su trabajo en el hemiciclo y en las comisiones, vulneren los «derechos fundamentales» de los diputados, esto es, la difusión de los documentos que manejan en sus escaños o de los mensajes recibidos en sus móviles. La posibilidad de retirar la acreditación a los gráficos –que no al medio, quien jurídicamente es responsable de la publicación–, por un plazo máximo de un año, está incluida en una instrucción de la Presidencia de la Cámara, adoptada con el parecer unánime de la Mesa después de que ésta analizara un informe jurídico sobre la compatibilidad entre la libertad de información y los derechos de los diputados.

Contiene la instrucción un preámbulo en el que Jesús Posada remarca que «quiere realzar y reforzar el derecho constitucional a la información y, simultáneamente, proteger otros derechos constitucionales también susceptibles de protección cuyo desarrollo armónico es exigencia cabal de un sistema democrático».