Alonso espera cambiar su suerte en Valencia

El trazado urbano de Valencia, que recorre las inmediaciones del puerto de Valencia, alberga desde mañana viernes hasta el domingo su cuarta prueba de un Mundial de Fórmula Uno, bajo la denominación de Gran Premio de Europa. Aunque el certamen llega a Valencia con el alemán Sebastian Vettel (Red Bull) lanzado a por su segundo título y con una cómoda ventaja de 60 puntos con respecto al segundo clasificado, el británico Jenson Button (McLaren), el gran premio valenciano presenta algunas incógnitas que se desvelarán durante el fin de semana.

En principio, la más importante podría ser la que afecta a la prohibición de variar el mapa motor entre la clasificación del sábado y la carrera de domingo, un cambio que puede afectar en mayor medida al equipo Red Bull, cuyos monoplazas se muestran especialmente rápidos en la tercera y definitiva ronda de la clasificación.

Esta decisión de la FIA se ha concretado esta semana y se une a la que entrará en vigor en el GP de Gran Bretaña del próximo 10 de julio y que limita los difusores soplados, un sistema que aprovecha los gases del motor para mejorar el rendimiento y la aerodinámica incidiendo en el difusor cuando no se está acelerando.

Pero hasta que no se demuestre lo contrario, Vettel llega al Gran Premio de Europa como principal favorito a la victoria y ser el primero en reeditar triunfo en Valencia tras ganar el pasado año, si bien también optan a repetir triunfo los brasileños Felipe Massa (Ferrari), ganador en 2008, y Rubens Barrichello (Williams), vencedor en 2009, aunque con diferentes opciones que el alemán.

De hecho, Vettel ha dominado con firmeza el certamen y ha logrado cinco victorias en las siete carreras disputadas y sus dos peores resultados han sido los dos segundos puestos logrados en los grandes premios de China y Canadá. Mucho menos afortunado en Valencia ha estado Alonso puesto que como mejor resultado cuenta el sexto puesto alcanzado en 2009 con Renault, ya que en 2008, también con la escudería francesa, se retiró en la primer vuelta, mientras que el pasado año fue octavo con Ferrari.

Precisamente en la carrera de 2010, además de una fortuna esquiva, la carrera del español se vio condicionada por la salida del coche de seguridad cuando iba tercero después de haber partido en la cuarta posición desde la parrilla. Alonso y Ferrari centran otra de la incógnitas de la carrera, ya que, en el GP de Europa, Pirelli estrena en el certamen un tipo de neumático, el medio, después de que hasta la fecha se haya contado con compuestos duros, blandos y súper-blandos, con los que la escudería italiana ha tenido un rendimiento muy diferente.
Mientras que con los neumáticos que tiene un mayor desgaste Alonso y Ferrari se han mostrado competitivos, con los duros han evidenciado una notable inferioridad con respecto a Red Bull y McLaren, de ahí la importancia de conocer como repercute el nuevo compuesto en el monoplaza del asturiano.

Al que se le da bien el trazado del Puerto de Valencia es a Lewis Hamilton (McLaren), ya que a pesar de no haber logrado la victoria en ninguna de las tres ediciones disputadas, en todas ellas ha ocupado la segunda plaza del podio, incluida la de 2010 en la que el inglés protagonizó una acción polémica al rebasar al coche de seguridad. Otra de las dudas que se deberá desvelar en las próximas horas es si el mexicano Sergio Pérez recupera su volante en Sauber, después de que en el pasado Gran Premio de Canadá, celebrado hace quince días, se encontrase indispuesto en la primera sesión de entrenamientos y tuviera que ser reemplazado por el español Pedro de la Rosa.

El también español Jaime Alguersuari llega a la carrera con los ánimos totalmente renovados tras lograr en Canadá el mejor resultado desde que llegó a la Fórmula Uno en 2009, ya que salió desde la calle de garajes después de cambiar los ajustes de su monoplaza, y cruzó la meta en octava posición.

Igualmente, tras completar en Canadá una buena carrera bajo la lluvia con sus dos monoplazas, Hispania Racing correrá en casa por segunda vez esta temporada en el Gran Premio de Europa con el objetivo de evitar las últimas plazas de la carrera.