El Gobierno abre una nueva guerra por el cementerio nuclear

El Consejo de Ministros desveló ayer por fin el informe de la Comisión Interministerial para la elección del Almacén Temporal Centralizado de residuos nucleares de alta radiactividad (ATC), que sitúa a Zarra (Valencia) como favorita, por delante de Ascó (Tarragona) y Yebra (Guadalajara).

Así lo desveló la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, que en su comparecencia tras la reunión de la cúpula de Gobierno anunció sin embargo que la decisión definitiva queda pospuesta al menos hasta la próxima semana, una vez se estudie el informe técnico.

«De momento, el debate continúa», dijo. De la Vega aseguró que el Gobierno ha pedido un segundo informe, de carácter jurídico, que ha sido encargado a la Abogacía del Estado y que analizará las competencias de las comunidades autónomas. La vicepresidenta consideró que el municipio valenciano «está bien posicionado». No obstante, aseguró que se tomará «la decisión más adecuada» para situar el depósito de desechos de las ocho centrales nucleares españolas «en el lugar que tenga las mejores condiciones».

De la Vega desautorizó así al departamento de Sebastián, que durante la mañana había llamado a diversos representantes políticos para anunciarles «la elección de Zarra». El anuncio, que estaba previsto para julio pero que fue retrasado al albur de un pacto de Estado de Energía entre Gobierno y oposición cuya consecución está ahora en entredicho, llegó horas después de que el consejero de Medio Ambiente de la Generalitat Valenciana, Juan Cotino, anunciara que Zarra había sido elegida para acoger el ATC.

El texto de Industria, titulado «Informe de propuesta de emplazamientos candidatos para albergar el emplazamiento del almacén temporal centralizado (ATC) y su centro tecnológico asociado», puntúa a Zarra con 304 puntos. Le siguen Ascó (Tarragona), con sólo cuatro menos (300), y Yebra (Guadalajara), con 290 puntos.

Municipios nucleares
Se da la circunstancia de que los tres favoritos se encuentran en la zona de influencia de sendas centrales nucleares, las de Cofrentes, Ascó y Zorita (ya clausurada). A continuación se sitúan Villar de Cañas (Cuenca), con 272 puntos; Melgar de Arriba y Santervás de Campos (Valladolid), con 228; Congosto de Valdavia (Palencia), con 218 y Albalá (Cáceres), con sólo 170 puntos.

Uno de los aspectos que más inciden en la puntuación es la calificación urbanística, un factor que «puede afectar a los plazos» de ejecución de unas obras de 700 millones de euros cuya primera fase llevará al menos cinco años. En los casos de Zarra y Ascó, los terrenos están calificados como industriales, , al contrario que el resto de candidatos, lo que podría retrasar el inicio de las obras hasta dos años.

La decisión no sentó bien en el Gobierno valenciano. Ante la imposibilidad de contactar con el presidente de la Generalitat, Francisco Camps, que se encontraba reunido, el secretario de Estado de Energía, Pedro Marín, se puso en contacto por la mañana con el consejero de Industria, Vicente Rambla, para explicarle que se valoraba a Zarra como destino del ATC, recibiendo la negativa de éste.

Fue tras este rechazo cuando el Consejo de Ministros decidió aplazar la elección definitiva del emplazamiento. Fue entonces cuando Cotino anunció que recurrirá la decisión y que espera que la rectificación del Gobierno sea «definitiva». Cotino reafirmó su posición «tajantemente en contra». Asimismo, explicó las dificultades técnicas que se puntualizaron en el informe presentado en febrero; movimientos sísmicos, dificultad de ubicación para el transporte, en definitiva, «una serie de dificultades que no aconsejan que en ese lugar» se ubique el depósito nuclear.

Ascó, en el aire
Por el momento, el Gobierno sigue analizando la ubicación y, al parecer, Ascó, municipio situado en Tarragona, sigue, a pocas décimas, la candidatura de Zarra, por lo que la ATC podría ubicarse, definitivamente, allí.

Sin embargo, el delegado del Gobierno catalán en Terres de l'Ebre, Lluís Salvadó, se mostró «satisfecho» porque, según consideró, el informe «aleja la infraestructura de Ascó».

El presidente de Castilla-La mancha, José María Barreda, por su parte, aseguró que fuentes gubernamentales le informaron personalmente de que el almacén nuclear no se instalará en ninguno de los dos candidatos situados en su Comunidad.