El ganado echa por tierra la corrida concurso de Logroño

Decepcionó la corrida concurso de ganaderías anunciada ayer, en su segunda edición, en el coso riojano de La Ribera. Reses de muy diversos encastes, pero todos con el mismo denominador común: la falta de emoción y el nulo juego que ofrecieron en los engaños de una terna que tan sólo pudo dejar algún destello aislado de su toreo.

El Fundi sorteó un animal de La Quinta que tomó cuatro puyazos. Fruto de ese castigo o de su falta de raza, el burel, soso y sin brillo, terminó rajado bien pronto. Poco más pudo hacer el madrileño con el cuarto. Un Guardiola que se orientó a las primeras de cambio.

Antonio Barrera pechó con un astado de Partido de Resina insípido con el que logró algunos derechazos estimables, mientras que al quinto, sobrero de Adelaida Rodríguez que saltó por el de El Puerto de San Lorenzo que fue devuelto, le buscó las vueltas en una faena de larga duración, pero que no llegó a buen puerto.

Cerró terna Javier Castaño se las vio con un Victorino que no humilló desde que salió de chiqueros. Tras cuatro varas, David Adalid se lució con las banderilleras en dos emocionantes pares. En la muleta, imposible, siempre con la cara por las nubes. Al sexto, de Torrealta, volvió a banderillearlo con poder Adalid. Previamente, se lució también el picador Fernando Sánchez. En el último tercio, Castaño extrajo buenos naturales con encaje y composición antes de que desarrolla sentido el animal.

Plaza de toros de La Ribera en Logroño. Cuarta de Feria. Corrida concurso de ganaderías con toros, por este orden, de La Quinta, Partido de Resina (descalificado), Victorino Martín, Guardiola (descalificado), Puerto de San Lorenzo (sustituido por un sobrero de Adelaida Rodríguez) y Torrealta, todos pitados en el arrastre. El Fundi, silencio en su lote; Antonio Barrera, silencio y silencio; y Javier Castaño, silencio en ambos Media entrada.