El deporte gana en audiencia por goleada

La retransmisión de eventos deportivos está generalmente ligada a audiencias millonarias. El fútbol se corona como rey. De hecho, el momento de mayor audiencia de la historia fue el encuentro que enfrentaba a España e Italia en la Eurocopa de 2008. No era para menos, porque «La Roja» se jugaba el pase a semifinales. Tan histórico momento fue visto por más de 15,3 millones de espectadores, lo que se tradujo en un 77,5% de cuota de pantalla. En la final del Mundial de Suráfrica 2011, más de 14,5 millones de espectadores (80,3% de cuota de pantalla) fueron testigos del gol de Andrés Iniesta, que permitió a España levantar la copa de campeones del mundo.

Otros deportes despiertan también gran interés. Es el caso de la Fórmula 1. El Gran Premio de automovilismo más visto de la historia fue el último de la temporada pasada, el de Abu Dabi, que dejó a Fernando Alonso a un paso de conseguir su tercer título mundial. Casi 9 millones de espectadores (cerca de un 60% de «share») sufrieron con el asturiano. El motociclismo o el ciclismo son otros ejemplos de audiencias millonarias.

Tan sólo algunas ficciones y «realitys» se aproximan. Así, entre los programas más vistos en los últimos años se cuela la votación del Festival de Eurovisión 2002, cuando Rosa López representó a España. Casi 14,3 millones de «eurofans» siguieron el evento. En lo que a ficción se refiere, el récord lo ostenta la recordada «Farmacia de Guardia», que en 1995 logró seducir a más de 11,5 millones de espectadores. Actualmente, ni los estrenos más exitosos alcanzan las audiencias de las emisiones deportivas.