Caso Bretón

Los compañeras del celador de Olot declaran que era «muy cariñoso»

Dos de las compañeras del celador Joan Vila, que acabó presuntamente con la vida de una decena de ancianos de la residencia La Caritat de Olot, han asegurado en su declaración que era un trabajador excelente y trataba "con cariño"a los residentes.

Según ha explicado el abogado de la defensa, Carles Monguilod, en un descanso en la declaración, estas dos trabajadoras han remarcado que era una buena persona y que se sorprendieron cuando se conocieron los hechos.

También han asegurado que el estado de las víctimas era "muy deteriorado"en el momento que se produjeron las muertes.

Antes del inicio de las declaraciones, Monguilod ha explicado que Vila ha sido trasladado del psiquiátrico de Quatre Camins a la prisión de Figueres, por lo que está "integrado en una vida normalizada"dentro de un centro penitenciario.

Ha asegurado que en un principio el acusado tuvo vigilancia 24 horas del día porque "había riesgo de autolesiones y tentativas de suicidio".

Monguilod ha explicado que falta el dictamen pericial de los forenses sobre el estado psiquiátrico y psicológico de Vila, y ha recordado que las sentencias se dictan tras valorar "muchísimas pruebas", no solo lo que digan los psiquiatras, aunque sea muy importante.

El abogado ha remarcado que le visita cada semana en la cárcel y que Vila mantiene lo que ha dicho, aunque la manera de analizar los hechos sea "diferente", por lo que no cree que en su declaración haya sorpresas.

Por su parte, Rafael Berga, abogado de siete de las once víctimas, ha asegurado que tras escuchar declaraciones que pueden aportar datos es "lógico"que Vila vuelva a testificar, porque cuando lo hizo solo había la suya.