Chacón carga contra los «politiqueros y togas» de la «derecha anticatalanista»

BARCELONA – Tras siete años en Madrid, la hija pródiga del PSC, Carme Chacón, regresó a casa para ser proclamada de nuevo cabeza de lista en la contienda del 20-N. Chacón, que se desentendió de la negociación de la financiación y ha pisado Cataluña lo justo, cosa que le reprochó Artur Mas, fue recibida con entusiasmo. Obtuvo el 94 por ciento de los apoyos para repetir como candidata, 259 votos a favor, 11 en blanco y cuatro en contra.
La ministra de Defensa se valió del aval de sus compañeros para pedirles «entusiasmo» y «trabajo» a ver si así logran dar la vuelta a los sondeos que sitúan al PP como vencedor el 20-N. En su primer discurso como candidata, se mostró más segura que hace cuatro años. Desveló por dónde irá su estrategia para reconquistar a los electores que confiaron en ella en 2008, situarse en el centro, entre «el anticatalanismo de la derecha reaccionaria» y «el independentismo rupturista».
Identificó a dos tipos de anticatalanes, los «ignorantes» y los que lo son por «mala fe», entre los que señaló a «tertulianos», «politiquillos que recogen firmas contra el Estatut», como hizo en su día el PP, y los que «llevan toga y quieren imponer su ideología desde los tribunales», en alusión a las sentencias contra el Estatut y la inmersión lingüística. Chacón recuperó el discurso «antiPP» que tantos réditos ha dado al PSC. Alertó de que CiU «olvida, calla y pacta con la derecha española». Pero también se situó en las antípodas de los independentistas, porque «romper es claudicar».