«Camellos» a 2000 euros de la libertad

Iván M. G., el «camello» que presuntamente suministró el estramonio a los dos jóvenes que fallecieron el pasado domingo en la «rave» del Monasterio de La Aldehuela de Getafe, saldrá a la calle bajo una fianza de 2.000 euros. El juez titular del Juzgado de Primera Instancia número 7 de Getafe acordó a última hora de ayer y después de interrogar durante horas al joven, de 23 años, y a su novia, Cristina, de 19, decretar prisión provisional bajo fianza, para el primero –que ya cuenta con otros antecedentes penales– y libertad con la obligación de personarse en el juzgado dos días al mes para su pareja.

El magistrado les imputó los delitos de homicidio imprudente –penas de hasta cuatro años– y otro de lesiones imprudentes. Según avance la investigación judicial en torno a lo sucedido la noche del sábado 20 de agosto, podrían ser acusados también de sendos delitos contra la salud pública recogidos en el artículo 368 de Código Penal, que juzga a aquellos «que ejecuten actos de cultivo, elaboración o tráfico, o de otro modo promuevan, favorezcan o faciliten el consumo ilegal de drogas tóxicas» y que establece penas de tres a seis años de cárcel.

Iván y Cristina, o «El Cabe» y su novia, como se les conoce en Coslada, pasaron la noche del jueves en la Comisaría de Getafe. En celdas diferentes, no sólo por una cuestión de sexos, también para evitar que pactaran la declaración que desde ayer a primera hora de la mañana realizaron ante el juez.

Ante el magistrado reconocieron haber estado en el lugar de los hechos el pasado sábado, así como estar en posesión del denominado «té del estramonio», que ingirieron Alberto del Olmo y Pablo Echegoyen –fallecidos horas más tarde– y Álvaro L. G., hospitalizado por fuertes alucinaciones. Fueron detenidos el miércoles, gracias a la descripción de los supervivientes a los tragos de estramonio que, según aseguraron en declaraciones a la Policía, les ofrecieron Iván y Cristina, asegurando que era un «licor casero, natural». Iván apenas pronunció palabra en la comisaría, pero lo suficiente como para que los agentes iniciaran la búsqueda de su novia, que finalmente acudió de forma voluntaria.

Al parecer, prepararon una infusión de estramonio –con semillas de esta planta– en casa de Iván antes de ir a la fiesta con la intención de «abrir mercado», bajo la estrategia de darlo a probar el primer día gratis y luego venderlo.