Sevilla

«Quien oculta es él no reconoce ni su ideología»

El candidato Torrijos no puede evitar sonreír con la acusación del PP sobre un «pacto oculto» con el alcaldable Espadas para repartirse el mandato por bienios. «Zoido ha perdido fuelle, creatividad, porque lleva cuatro años de campaña», espetó junto al parque Amate.

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Antonio Rodrigo Torrijos criticó que el PP «no tiene puntería para su campaña ni pagando a empresas punteras; nosotros trabajamos con militantes; son dos formas de entender la política, como negocio o como servicio». «Zoido dice todos los días una tontería, como lo del pacto ante notario, que es un intento de sortear la Ley», denunció. «La agenda oculta es la que Zoido enmascara y empieza a enseñar la patita por debajo de la puerta», espetó. «Ahora dice que va a modificar el PGOU, lo que supone el anuncio de un nuevo periodo de especulación inmobiliaria y de primar el interés particular sobre el general», señaló el líder de IU, que apuntó a la «recuperación del negocio del suelo para las 13 familias que siempre lo tuvieron». «Zoido trabaja para los suyos, para el poder financiero y la especulación», añadió. «No hay pacto oculto, sino total transparencia. Quien enmascara y oculta es Zoido, que dice que no es político y utiliza el fraude electoral con proyectos sin plazos ni presupuesto y ocultando hasta su ideología».
El candidato socialista Juan Espadas señaló que «el adversario político» es el Partido Popular, cuyo candidato, Zoido, consideró que «ha tirado la toalla».

A las barricadas, por Silvio
El talante, ese concepto-clínex tan manoseado por la Nueva Vía. Abrió la precampaña Juan Espadas junto a Griñán y Rubalcaba en un hotel cartujano, donde se reivindicó la figura de Largo Caballero, dirigente del PSOE, por buen mote «el Lenin español», ministro con Primo de Rivera y autor de la siguiente declaración de intenciones: «Si los socialistas somos derrotados en las urnas, iremos a la violencia». Juzguen ustedes mismos. Unos minutos después, el alcaldable de la capital de la región europea con menor índice de lectura recomendaba a la concurrencia «no leer los periódicos». Qué pérdida de tiempo, cuando el partido ha infiltrado en las redes sociales a unos comisarios de la verdad 2.0, ideales para dictar opiniones. Si aparece por allí Gutiérrez Solana, retoma un siglo más tarde sus escenas de la España negra.