Huelgas

Los disturbios estudiantiles empañan la huelga general

A los típicos momentos de tensión con los piquetes, se añadieron altercados entre estudiantes y Policía

Un grupo de manifestantes intentó entrar en las oficinas de la delegación del Banco de España. Fue uno de los momentos más tensos de la mañana
Un grupo de manifestantes intentó entrar en las oficinas de la delegación del Banco de España. Fue uno de los momentos más tensos de la mañanalarazon

VALENCIA- La jornada de huelga en Valencia, que empezó de forma más o menos tranquila, acabó recordando demasiado a la conocida como «primavera valenciana», las revueltas estudiantiles que sacaron a la calle a cientos de jóvenes durante el pasado mes de febrero. Enfrentamientos entre jóvenes y la Policía Nacional, agresiones, gritos, calles cortadas, contenedores ardiendo...unas escenas que poco tenían que ver con las razones que llevan a una huelga general y que estuvieron protagonizadas por estudiantes.
A las cuatro de la tarde, eran ya 22 los detenidos por atentado contra la autoridad y desorden público (al final del día habían sido puestos en libertad todos excepto dos), y cinco heridos leves.
La tensión había ido creciendo a lo largo del día, hasta explotar pasadas las dos de la tarde precisamente delante del edificio emblema de los hechos de febrero: el instituto Lluís Vives.
Allí, cientos de estudiantes cortaron la calle Xàtiva, y la Policía Nacional se vio obligada a desalojarles. Ante la negativa de los jóvenes, empezaron los enfrentamientos, en los cuales un joven resultó herido en la cabeza y tuvo que ser atendido por los servicios médicos y trasladado a un hospital.
Por la mañana, el piquete informativo que suele atravesar las calles del centro de Valencia en los días de huelga general, se convirtió ayer en una gran manifestación. Fue el hecho que marcó la diferencia con respecto a los dos paros generales que se han celebrado recientemente (uno en marzo pasado y el otro en septiembre de 2011).
A diferencia de las anteriores ocasiones, en las que grupos de sindicalistas se dedicaban a ir comercio por comercio para cerrar aquellos que hubieran decidido no hacer huelga, esta vez fueron miles de personas las que se unieron a la «procesión».
El denominador común fueron los tensos momentos que se suelen producir en estas jornadas. Gritos, golpes a los escaparates, mesas y sillas de las cafeterías por los suelos, llegando incluso a derramar el café a unas chicas que estaban sentadas en una cafetería. Insultos y proclamas como «si esto no se arregla, guerra, guerra, guerra», fueron constantes a lo largo de toda la mañana.
Los momentos de máxima tensión se produjeron en las puertas de la delegación del Banco de España y de la central de Bankia, cuando decenas de personas con pancartas de «Stop desahucios» irrumpieron en las sedes a gritos de «ladrones» y «asesinos». La Policía Nacional acudió enseguida y tuvo que sacarlos de las instalaciones de estas entidades.
Como siempre, la mayoría de los comercios del centro permanecían cerrados al paso de los sindicatos, pero posteriormente abrían sus puertas.
Seguimiento del 20 por ciento
La delegación del Gobierno en la Comunitat cifró ayer el seguimiento del paro en un 20 por ciento. Asimismo, la delegada Paula Sánchez de León confirmó que los servicios mínimos se habían cumplido en un ciento por ciento y aseguró que, en términos generales «se ha logrado el equilibrio y un comportamiento ejemplar de los ciudadanos».
Por sectores, el automóvil valenciano fue el único en el que se secundó de manera masiva el paro, en torno al 95 por ciento. En el transporte, fue medio, de entre el 40 y el 60 por ciento. En el comercio, sanidad, educación y Administraciones Públicas fue bajo, entre el diez y el 40 por ciento. En el metal, el calzado, el textil, y la energía, no llegó al diez por ciento. El consumo eléctrico se mantuvo en los mismos términos que el pasado miércoles y la central nuclear de Cofrentes no sufrió apenas paros.
Por su parte, la Generalitat valenciana siguió la misma estela de la Delegación del Gobierno y cifró el seguimiento de la jornada de huelga en el 24,58 por ciento en Educación y entre el 17 y el 23 en Sanidad. El conseller de Gobernación, Serafín Castellano, afirmó que los datos son similares o incluso inferiores a los de la pasada huelga general del 29 de marzo.
Pero si en el balance general del sistema sanitario público el porcentaje alcanzó el 23 por ciento, en atención primaria apenas rozó el 17,5 por ciento.
Según informaron desde el Departamento que dirige Luis Rosado no hubo incidentes en ninguno de los centros, que funcionaron con total normalidad. Los servicios de urgencias, registraron la misma actividad que otro día cualquiera y la programación, tanto en consultas como en cirugía, evitó molestias a los usuarios.
En cuanto a las farmacias, ayer seguían prestando los mismos servicios que establecieron hace nueve días, cuando empezaron su huelga indefinida por los impagos de la Generalitat.
Bastante distintos fueron los datos facilitados por los sindicatos. Según CCOO-PV, UGT-PV e Intersindical Valenciana el índice de participación en la huelga general en la Comunitat fue de un 76 por ciento. En Enseñanza el dato fue del 65 por ciento; en universidades, del 90; en Sanidad del 59 por ciento y en Justicia del 56 por ciento.

 

Les Corts, en servicios mínimos
Los grupos de la oposición parlamentaria no acudieron ayer al pleno de Les Corts. Ni Compromís, ni EU, y el PSPV envió a un «retén» de cuatro diputados que fijaron posición en las leyes que ayer se aprobaron como la de la violencia contra las mujeres o la de Reestructuración del sistema empresarial público. El portavoz del PP, Jorge Bellver, señaló que sus compañeros diputados estaban «trabajando por los ciudadanos» mientras los de la oposición «protestaban por los ciudadanos». Por su parte, el síndico del PSPV, Antonio Torres, señaló que su grupo tiene independencia frente al PSOE nacional cuyos diputados sí asistieron ayer al Congreso. Donde se aplazaron las comisiones previstas fue en la Diputación de Valencia.