Cerco a los «okupas ladrones» de Ciutat Vella

BARCELONA- El Ayuntamiento de Barcelona terminó ayer el desalojo de una finca «okupada» en la calle Banys Nous de Ciutat Vella después de recibir una autorización judicial que declaraba inhabitable el edificio y poder echar así a las 30 personas que vivían de forma ilegal en sus once viviendas. Con la intervención de la Guardia Urbana y los Mossos d'Esquadra, los primeros desalojos se hicieron a principios de semana, cuando los primeros vecinos lo abandonaron de forma voluntaria.

Edificio con mala fama
Vecinos y comerciantes de la zona habían enviado numerosas quejas por el uso indebido del edificio, y denunciaban que las personas que vivían o pasaban por el edificio se dedicaban a robar por la zona, eje turístico de la ciudad, y a vender droga, además de que muchos de ellos eran toxicómanos y protagonizaban peleas constantes. Además, habían manipulado la instalación eléctrica para captar el servicio de manera fraudulenta, y el sistema de saneamiento tenía filtraciones de aguas residuales, además de tener vigas en mal estado, entre otras afectaciones.

La concejala de Ciutat Vella, Mercè Homs, destacó que el edificio pudo ser desalojado gracias a la nueva ley para el Derecho a la Vivienda que permite iniciar expedientes de inhabitabilidad que comporten su desalojo por el riesgo implícito para las personas.