Andalucía

Rebajas matrimoniales

La Razón
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El ministro de justicia, señor Gallardón, para aligerar los asuntos judiciales, propone que te puedas casar notarialmente. Creo que se puede llegar más lejos: casarse por el Corte Inglés, lo pagas con la tarjeta en tres meses y si en ese plazo se divorcia la pareja le devuelven el dinero. Con la eficacia del Corte Inglés, seguro que al casarte te dan un pequeño cóctel con champán incluido en el Club del Gourmet y para rematar la operación te regalarían un crucerito por el Mediterráneo. Todo esto pasa porque la herencia recibida no es mala, es la peor. Por ello, me parecería muy razonable que el ministro de Hacienda, señor Montoro se opusiera con todas sus fuerzas a lo que quiere hacer el de Cultura, distribuir por museos españoles y americanos la carga de oro y plata recuperada por el Oddissey. Con una moneda de oro por museo, la cultura queda dignamente representada, las toneladas restantes para la hacienda pública. En muchas casas importantes, si hay que vender los cuadros, pues se venden, y la cuenta corriente vuelve a estar con brotes verdes, así que habrá que ir pensando en el Museo del Prado, donde ya no hay un sitio donde colgar algo. La única barrera sería no convertir el edificio del museo en apartamentos de lujo. Si con estas operaciones límites se deja a la famosa prima, sin nervios y tranquilita, las cosas pueden empezar a mejorar. Claro que en Andalucía, si alguna vez nos enteramos de la verdadera deuda, tendremos que vender la Giralda a China, la Catedral a Brasil y la Torre del Oro a la señora Merkel, para que la ponga delante de la puerta de Brandenburgo. Se conseguirían dos cosas: una disminuir el déficit y la otra terminar con la polémica sobre la Torre Pelli, que ya no tendría que rivalizar con la altura de la Giralda. La torre sí que no la compra nadie.