Portabella reta a Laporta a unas primarias para sellar una candidatura unitaria

Barcelona- El presidente del grupo municipal de ERC en el Ayuntamiento de Barcelona, Jordi Portabella, se sumó ayer a la propuesta. Defendió «una especie de votación de primarias como las que hace el Partido Demócrata en los Estados Unidos», donde «todo el mundo pueda presentar a las personas que considere más idóneas, sin necesidad de que sean militantes». Además de integrar a partidos de corte independentista, Portabella abrió las puertas de la supuesta candidatura a socialistas desencantados con la eterna búsqueda de la España federal. «Pienso que en estos momentos hay muchos socialistas que descartan avanzar hacia el federalismo y que, por tanto, pueden unir sus esfuerzos a una opción claramente soberanista», admitió a lo largo de una entrevista en Catalunya Ràdio. Portabella sólo puso una condición para tirar adelante con las primarias, tener en cuenta el peso de ERC como partido más antiguo y con más votantes de todas las fuerzas independentistas. El líder municipal de Esquerra confirmó que la semana que viene continuarán las conversaciones con el partido de Laporta y tomarán contacto con Reagrupament y las CUP. Tras la debacle sufrida el pasado 28 de noviembre en las urnas –los republicanos perdieron más de la mitad de sus diputados en el Parlament de Cataluña–, ERC centra ahora sus esfuerzos en recuperarse de cara a las municipales del próximo 22 de mayo. La situación en Barcelona es delicada. Mientras que en el Parlament, un partido necesita al menos el 3 por ciento de los votos para obtener representación, en la capital catalana necesita el 5 por ciento. Hace cuatro años, ERC consiguió el 8,81 por ciento. Perdió un concejal y optó por romper el tripartito y pasar a la oposición para recuperar credibilidad entre sus votantes. ERC alegó que no compartía el modelo de ciudad de los socialistas, aunque en los momentos clave –presupuestos, PAM– ha dadosu voto al bipartito. Hasta el 22 de mayo no se sabrá si la decisión de Portabella de abandonar el tripartito fue mejor que la de Josep Lluís Carod Rovira o Joan Puigcercós de continuar junto al PSC e ICV en la Generalitat.